CÁCERES 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
La localidad cacereña de Villar del Pedroso celebra desde hoy su peculiar 'Carnaval de Ánimas', una fiesta que data del siglo XVII y que "mitad militar y mitad religiosa" y que "no tiene nada que ver con el típico carnaval de chirigotas y charangas y disfraces", explicó el alcalde del municipio cacereño, Eduardo Villaverde, el día de su presentación.
Se trata de un homenaje a un general, hijo del pueblo, que ante la superioridad del enemigo en una batalla se encomendó a Las Benditas de Ánimas y les prometió, en caso de victoria, una función anual. Como logró el triunfo, a su regreso al pueblo instituyó la fiesta del Martes de Carnestolendas.
En este sentido, la peculiaridad de este Carnaval es que todos los miembros de la "soldadesca", entre 40 y 50 personas, van ataviados con el traje típico. Los colores de las faldas, bandas y pañuelos van variando de color dependiendo del día de que se trate. Así el primer domingo de color rojo, el lunes verde o avellana, el martes morado, el miércoles gris y el último domingo también rojo con refajo.
De esta manera, aunque la fiesta comenzará realmente mañana domingo, día 22, a las 8,00 horas con la salida de la "soldadesca" a tomar el tradicional aguardiente; el sábado día 21 se celebrará una conferencia a cargo del historiador de Talavera de la Reina, Miguel Méndez, titulada 'Recursos turístico de Villar del Pedroso: historia, naturaleza, patrimonio, fiestas'.
Asimismo, el domingo, después de la toma de aguardiente, a las 11,00 horas tendrá lugar la recogida de sargentos por los tamborileros para celebrar después, a las 12,00 la Santa Misa por las Ánimas. La festividad continuará con el baile de 'El Serengue' en la plaza y culminará su primer día con una oración del Rosario en la iglesia. Todas estas actividades se repetirán durante los días 23 y 24 de Febrero y el día 1 de marzo. Mientras que el sábado 28 de Febrero tendrá lugar una verbena popular a las 22,00 horas.
El día grande es el Martes de Carnaval con el llamado 'Ramo de las Ánimas' que está formado por unas andas procesionales sobre las que se coloca un eje central con varias ramificaciones y sobre ellas roscas de pan, amasados con anises. El soporte va adornado con ramas de olivo, cadenetas, flores, serpentinas y cintas de colores.