MÉRIDA, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
La localidad pacense de Castuera ha inaugurado este viernes, 21 de abril, un monumento en el Cementerio de la localidad que recoge los nombres de unos 300 represaliados por el régimen franquista.
Se trata de una lista que es aún parcial de las personas que fueron represaliadas y cuyos cuerpos, en buena parte de los casos, aún no han sido localizados.
El acuerdo para erigir el Monumento-Memorial fue adoptado por unanimidad por los tres grupos que actualmente forman la corporación municipal de Castuera, en un pleno celebrado el pasado 27 de noviembre de 2015.
En la financiación del monumento han intervenido el Ayuntamiento de Castuera, la Asociación AMECADE (Asociación Memorial del Campo de Concentración de Castuera) y familiares de los represaliados.
En el acto, celebrado en medio de la emoción de los descendientes de los asesinados, ha intervenido el presidente de la Diputación Provincial de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, que ha recordado que el único "delito" cometido por los represaliados fue, en su día, defender las libertades y la democracia que existían en aquel momento.
También ha dicho que, recordando sus nombres, se dignifica el propio pueblo de Castuera, porque negar la represión "es terrorismo del olvido", según recoge la diputación provincial en una nota de prensa.
Aunque entre los nombres del monumento "sólo figuran unos pocos de mujeres", Gallardo ha querido recordar también a "tantas madres, hijas y esposas a las que se mató en vida, obligándoles a afrontar las humillaciones que les impuso la dictadura tras perder a sus familiares".
Gallardo ha llamado a defender la aplicación de la Ley de Memoria Histórica y ha señalado que, en 2019, la provincia de Badajoz estará "limpia de vestigios que dañan la memoria de una parte de la sociedad española". El presidente de la Diputación pacense ha aclarado que esto "no es revisionismo, sino justicia".
Por su parte, la secretaria general de Cultura de la Junta de Extremadura, Miriam García Cabezas, ha señalado que este monumento erigido por Castuera "está en la línea de la defensa de los Derechos Humanos Universales" y ha recordado que desde la Junta de Extremadura se está impulsado una nueva regulación de la Memoria Histórica "surgida del consenso".
El alcalde de Castuera, Francisco Martos Ortiz, ha pedido disculpas por el tiempo que se ha tardado en hacer el monumento, pero ha destacado que "después de nada, hemos hecho todo: unidos y sin que suponga un conflicto en Castuera".
El presidente de AMECADE, Manuel López Navarro, ha aceptado que este monumento viene "a restañar algunas de las heridas abiertas", pero ha lamentado que la sociedad civil ha tenido que "sustituir en muchos casos las acciones que las instituciones deberían haber llevado a cabo en la recuperación de la memoria de los represaliados".
Tras escuchar diversos testimonios de los descendientes de los ejecutados, los asistentes al acto del Cementerio terminaron componiendo un muro floral junto al Memorial con los claveles que llevaban en sus manos.
