El Hospital Infanta Cristina de Badajoz, pionero en implantar el desfibrilador "más pequeño y duradero que se conoce"

Hospital Infanta Cristina de Badajoz
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 28 enero 2014 13:28

BADAJOZ, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Hospital Infanta Cristina de Badajoz es "pionero" en el tratamiento de la insuficiencia cardiaca y la muerte súbita, ya que uno de los primeros centros españoles en implantar el desfibrilador "más pequeño y duradero del mundo", así como en utilizar un nuevo electrodo cuadripolar.

Este electrodo se implanta en el ventrículo izquierdo y su diseño permite aplicar la electroestimulación desde localizaciones más idóneas, "ofreciendo una excelente estabilidad y un menor consumo de la batería del desfibrilador", todos ellos aspectos importantes para los pacientes en terapia de resincronización cardíaca.

El desfibrilador automático implantable (DAI) es un aparato diseñado para monitorizar el ritmo cardiaco del paciente. En caso de que presente ritmos rápidos (taquicardia) de características potencialmente peligrosas, el DAI las suprime mediante pulsos o descargas eléctricas, según informa el Gobierno de Extremadura en nota de prensa.

Los cardiólogos del hospital pacense Juan José García Guerrero y Joaquín Fernández de la Concha han sido los encargados de llevar a cabo la intervención con estos novedosos sistemas implantables, que "facilitan la implantación y el desarrollo de la terapia de insuficiencia cardiaca, a la vez que satisface las necesidades tanto de médicos como de pacientes".

LARGA DURACIÓN

"Este revolucionario desfibrilador implantable tiene características relevantes que podrían facilitar considerablemente la terapia de resincronización cardíaca de los pacientes y su calidad de vida", explica el doctor Fernandez de la Concha, quien ha explicado que se eligió el dispositivo "por su larga vida útil" porque "es uno de los desfibriladores (DAIs) más pequeños del mercado".

Y es que, según señala el doctor, su tamaño es similar al de un marcapasos, un aspecto que ha considerado importante porque "mejora la comodidad del paciente y al mismo tiempo logra resultados estéticos óptimos".

En el Hospital Infanta Cristina de Badajoz se han tratado ya 450 con la terapia de resincronización cardiaca con "excelentes resultados", pero en estos casos en concreto, la batería empleada es la de mayor longevidad existente en el mercado, con una duración de 8,1 años o más.

Esto le confiere múltiples ventajas a largo plazo, ya que reduce la necesidad de recambio de batería cada 4-6 años, minimizando así la exposición del paciente a intervenciones quirúrgicas futuras y suponiendo un coste menor a medio-largo plazo para el sistema sanitario.

Los electrodos para desfibrilación son cables aislados que conectan el desfibrilador automático implantable (DAI) o desfibrilador de terapia de resincronización cardíaca al corazón.

Algunas de las características de este "avanzado electrodo cuadripolar" para los desfibriladores implantables, son una modesta reducción de su tamaño para facilitar su manipulación y maniobrabilidad, sin alterar el grosor del aislamiento ni la fiabilidad, atributo de vital importancia, ya que este tipo de electrodos se implantan en el interior del corazón durante la vida útil de los dispositivos.

Además cuenta con numerosas configuraciones de espaciado de los electrodos para adaptarse a las distintas anatomías de los pacientes, incluye diseños en espiral 3D para maximizar el contacto del electrodo con el miocardio y minimizar los umbrales de captura de la estimulación en localizaciones no apicales.

Los electrodos cuentan con la punta de electrodo más pequeña del sector y con una variedad de opciones de fijación que optimizan la estabilidad del electrodo, lo cual permite a los médicos acceder a vasos que no pueden alcanzar otros electrodos cuadripolares.