Investigadores encuentran poblaciones de arroz negro en parcelas de diversas localidades extremeñas

Campo de arroz en Valencia
EP
Actualizado: martes, 22 marzo 2011 17:07

MÉRIDA, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

Investigadores extremeños han localizado poblaciones de arroz negro en parcelas de Hernán Cortés, Vegas Altas y Logrosán, por lo que para 2011 se han planteado el objetivo de seguir su evolución y estudiar "la relación entre la diversidad de arroz salvaje y el historial de las parcelas donde las diferentes muestras fueron tomadas".

Se trata de asunto "llamativo" para los investigadores, ya que el arroz negro "es una especie de arroz salvaje diferente a todas las demás", según ha explicado la doctora María Dolores Osuna, investigadora principal del proyecto 'Control de malas hierbas en los campos de arroz de Extremadura' durante la campaña 2009-2010.

El proyecto ha sido desarrollado en colaboración con el Servicio de Sanidad Vegetal de la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural, y financiado conjuntamente por la Junta de Extremadura y el Feder.

Así, la doctora María Dolores Osuna, acompañada por otros técnicos del centro, ha adelantado en una jornada celebrada en Don Benito las primeras conclusiones extraídas de este trabajo, que engloba ensayos de eficacia de herbicidas en juncia y caracterización morfológica y molecular de arroz salvaje en Extremadura, dos de las especies de malas hierbas más dañinas que existen en la actualidad.

Los ensayos sobre eficacia, que se han llevado a cabo en diferentes estadios de crecimiento de la planta en invernadero, así como en parcelas experimentales, han puesto de manifiesto las diferencias existentes entre unos herbicidas y otros, según informa la Junta de Extremadura en nota de prensa.

Avanza que durante los próximos meses se continuará el trabajo estudiando aquellos herbicidas que han resultado más eficaces, además de otros nuevos, y se trabajará con juncia procedente de otras zonas de España.

ARROZ SALVAJE

En cuanto a la caracterización del arroz salvaje, cuyo objetivo es definir el grado de diversificación de esta especie en Extremadura, los resultados muestran la "alta variabilidad existente tanto morfológica como molecular, lo que podría venir explicado por un alto grado de hibridación".

También cabe destacar que la mayor parte de estos arroces son más parecidos a variedades comerciales de grano corto, mayoritarias en Extremadura hasta mediados de los años 90, lo que "pone de manifiesto que la problemática de las malas hierbas en los campos de arroz viene de atrás", explica.

Para este estudio en concreto se ha contado con unas 200 muestras, entre las que se incluían variedades comerciales y de otras zonas de España, como Navarra, Aragón, Cataluña, Valencia y Andalucía, además de Portugal.

PRÓXIMOS TRABAJOS

La jornada ha concluido con un adelanto del trabajo que este Departamento llevará a cabo durante los tres próximos años a través del proyecto 'Control de Echinochloa spp y Leptochloa spp en arrozales extremeños', financiado por el IV Plan Regional de I+D+i de la Junta de Extremadura.

Un proyecto en el que también se hará una caracterización morfológica y molecular de estas malas hierbas con un doble objetivo, por un lado, establecer la relación entre las diferentes especies y el uso de herbicidas, y por otro, estudiar posibles poblaciones resistentes.

IMPORTANCIA DE ESTA INVESTIGACIÓN

Destaca el Gobierno regional que Extremadura es una de las primeras regiones productoras de arroz en España, y es la zona de cultivo de las Vegas Altas la que concentra la mayor parte de la superficie arrocera de la región, en concreto el 80 por ciento.

De ahí la importancia de la línea de investigación en la que trabaja el Centro Finca La Orden-Valdesequera desde el año 2008, centrada en la erradicación de malas hierbas en los campos de arroz de Extremadura.

Resalta que en este cultivo, como en la mayoría, el control de las malas hierbas es fundamental, ya que compiten por el espacio, la luz y los nutrientes. No solo disminuyen la cosecha y la calidad del grano, sino que incrementan los costes de producción, recolección, secado y procesamiento industrial.

Finalmente señala que "especialmente problemático es el conocido como arroz salvaje, ya que pertenece a la misma especie que el arroz cultivado", por lo que su control selectivo en los arrozales "es casi imposible y su erradicación muy difícil debido a la similitud entre ambos". Además, apunta que causa graves daños económicos al deteriorar la calidad del arroz comercial.