La Junta afirma que era "viable" haber formado la mano de obra para implantar la fábrica de baterías en Extremadura

   MÉRIDA, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -

   El consejero de Economía, Ciencia y Agenda Digital, Rafael España, ha asegurado que la falta de mano de obra cualificada no ha sido el motivo por el que el grupo Volkswagen no se ha decantado finalmente por Extremadura para ubicar su fábrica de baterías para coches.

   España ha señalado que con el "horizonte de trabajo" que manejaba la compañía hubiera sido "perfectamente viable" haber desarrollado los planes de formación y cualificación necesarios para su implantación en Navalmoral de la Mata (Cáceres).

   Así lo ha indicado en su comparecencia, a petición del Grupo Popular, ante el Pleno de la Asamblea, para dar cuenta sobre la situación en la que se encuentran los grandes proyectos anunciados para la región, y sobre los que ha señalado que el Ejecutivo regional está poniendo "todas las facilidades posibles" que le permite el marco legal para atraer estas inversiones.

   Sin embargo, son finalmente las empresas las que "en base a variables que no dependen" de la administración, las que deciden o no acometer estos proyectos.

   Uno de estos proyectos era la gigafactoría del grupo Volkswagen, que finalmente tendrá como destino Sagunto, en Valencia, con la cual Extremadura tenía algunas desventajas, que en ningún caso sería la falta de cualificación profesional, según ha dicho.

   El dirigente extremeño ha aseverado que, a tenor de los plazos que maneja la empresa, se podrían haber desarrollado los planes de formación necesarios e incluso se podría haber propiciado el retorno de trabajadores extremeños que emigraron en su momento a las costas del Levante o del Norte del país, "fruto de la reestructuración del sector automovilístico".

   Con lo que sí ha reconocido que Extremadura no puede competir con Sagunto es con su puerto marítimo. Asimismo, ha señalado que las condiciones logísticas "no son dispares", si bien se ha referido a la "proximidad a los centros de producción", algo que "evidentemente son las empresas las que valoran los costes de implantarse en un territorio u otro".

   Una vez conocido el destino final de este proyecto, ha reafirmado que la Junta, tanto para este como para otros que están sobre la mesa y para futuras inversiones, "siempre está dando todas las facilidades posibles, dentro del marco legal establecido, e incluso legislando para simplificar y hacer mucho más óptima la tramitación".

   Pero, ha insistido, "son las empresas las que en base a variables que no dependen de nosotros, deciden o no acometer los proyectos en nuestra comunidad".

AL FINAL DECIDEN LAS EMPRESAS

   Otros proyectos sobre los que la oposición le ha preguntado han sido Elysium City, en Castilblanco, la Azucarera de Mérida, el centro dedicado al budismo en Cáceres, o el parque acuático y gran hotel de lujo en Casar de Cáceres, así como también ha entrado en el debate el futuro de Marina Isla de Valdecañas.

   El consejero ha realizado un somero repaso de la tramitación administrativa de estas inversiones, sin ofrecer novedades al respecto. Así, sobre el gran proyecto de ocio en Castilblanco, ha señalado que la Junta viene cumplido "escrupulosamente" con los pasos establecidos en la ley de grandes instalaciones de ocio, y que el "proyecto avanza", de modo que "será el empresario el que decida finalmente si lo lleva a término.

   Con respeto a la azucarera de Mérida, ha señalado que "hace unos días" se han mantenido reuniones en busca de la financiación necesaria para un proyecto que también cuenta con el apoyo del Gobierno, así como se están analizando las alternativas de autoconsumo energético para abaratar los costes de producción.

   La comparecencia de España ha sido solicitada por el Grupo Popular que, en palabras del diputado Hipólito Pacheco, a fin de conocer la situación de estos proyectos que han sido anunciados "a bombo y platillo" por la Junta, algunos desde la pasada legislatura, sin que ninguno de ellos cuente con certezas de seguir adelante.

CASTILLOS EN EL AIRE

   El más "pomposo" de ellos el de los "casinos de la Siberia", Elysium City, para el cual incluso "se aprobó una ley en exclusiva" que hasta ahora lo único que ha generado ha sido una "enorme ilusión sabiendo que son castillos en el aire".

   Asimismo, también ha aludido a las informaciones que sitúan en Francia la azucarera prevista en Mérida, y a otros que están por concretar como el Buda de Cáceres o el parque acuático de Casar de Cáceres.

   Pero sin duda, el "más importante y más factible", y que además hubiera "cambiado radicalmente, para bien", la comunidad autónoma, era el de las fábricas de baterías de Volkswagen, que además hubiera supuesto una "compensación" al futuro cierre de la central de Almaraz para la comarca de Campo Arañuelo.

"Generan una ilusión ficticia" en la población, le ha reprochado al gobierno regional, "pero luego nada", ha señalado, apuntando a las que considera debilidades de la comunidad autónoma, principalmente la falta de infraestructuras.

   Por su parte, el portavoz del Grupo Parlamentario de Ciudadanos, David Salazar, ha considerado que, más allá de la libertad de elección de las empresas sobre dónde invierte, es "responsabilidad" de la Junta "que elijan Extremadura sobre otras regiones".

   Al respecto, ha afirmado que la fábrica de baterías, que era un "proyecto que cambia la región", no se ha implantado en Extremadura por falta de infraestructuras y mano de obra cualificada.

   Y sobre el resto, como la Azucarera o Elysium, "no hay ni una sola certeza, ni una sola piedra", al tiempo que ha propuesto nuevamente, dadas las dificultades que tiene la región para atraer grandes inversiones, que se apueste "claramente" por dar continuidad al "mayor megaproyecto" que ha tenido nunca Extremadura, en alusión a la central nuclear de Almaraz.

   Por último, ha reprochado la gestión que se ha realizado sobre Marina Isla de Valdecañas, sobre la cual ha deseado y ha mostrado su apoyo para que finalmente no se proceda a su demolición, pero "la que han montado" con este proyecto "tira para atrás a muchos inversores".

   Asimismo, el diputado de Unidas por Extremadura Álvaro Jaén cree que más allá de la decisión de las empresas de instalarse donde crean más conveniente, está la apuesta por un modelo productivo y económico, en tanto que son las administraciones "las que deciden las condiciones" en las que lo hacen.

   Jaén ha recordado las bonificaciones fiscales de hasta el 95% ofrecidas a proyectos como la azucarera, sobre la cual además pone en duda su capacidad para la generación de empleo, al igual que el "extrevegas", como ha bautizado a Elysium City después de que no lo quisieran, ha dicho, ni en Aragón ni en Madrid. Además, ha criticado que se le permita operar con "libertad de horarios", lo cual afecta a la calidad del empleo.

   Por todo ello, ha apostado por las inversiones para la comunidad, pero sin apostar para ello en convertir Extremadura en un "paraíso fiscal" ni en una tierra de "mano de obra barata", porque "compitiendo a la baja no se sale del subdesarrollo". "Es imposible", ha dicho.

TIERRA ATRACTIVA PARA INVERSIONES

   Finalmente, el diputado socialista Andrés Moriano ha criticado el discurso de PP y Ciudadanos por el que "cuanto peor" para la comunidad, "mejor" para ellos, ante lo cual ha reiterado que Extremadura, como demuestran los proyectos que hay sobre la mesa, "se ha constituido en una región atractiva para inversiones y el talento".

   Así, ha querido huir del mensaje pesimista de la oposición para afirmar que Extremadura se encuentra "en disposición" de acoger todas las inversiones, así como que pueden estar seguros de que la comunidad "podrá satisfacer todas las demandas que requieran".