MÉRIDA, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las matriculaciones de coches han descendido un 37,65 por ciento en enero en Extremadura con respecto al mismo mes del año anterior, ya que han pasado de 1.441 unidades en 2010, a 909 en el 2011.
Según los datos facilitados en nota de prensa por la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto), en la provincia de Badajoz el descenso fue del 35,13 por ciento en las matriculaciones, ya que en enero de 2011 se han matriculado 602 vehículos, frente a los 928 del 2010.
Por su parte, en la provincia de Cáceres, se ha pasado de 513 unidades matriculadas en enero de 2010, a 307 en enero de 2011, lo que representa un descenso del 40,16 por ciento.
En el conjunto nacional, las matriculaciones han descendido un 23,39 por ciento en enero, ya que se ha pasado de 70.352 unidades matriculadas en el primer mes de 2010, a las 53.895 en el de 2011.
UN COCHE POR CADA CINCO EMPLEADOS
Ante esta situación, Faconauto ha apuntado que los concesionarios de automóviles vendieron sólo un coche de media por cada cinco empleados durante el pasado mes de enero, por lo que ha advertido de que estas empresas no podrán mantener sus estructuras ni pagar las nóminas de sus trabajadores si siguen cayendo las ventas de coches.
La patronal de los concesionarios vaticina que el sector de la distribución seguirá destruyendo empleo cualificado en los próximos meses. De hecho, el tráfico de clientes cayó un 50% en enero, con lo que las carteras de pedidos son "testimoniales, lo que augura un mes de febrero en la misma línea".
El presidente de Faconauto, Antonio Romero-Haupold, recordó que las redes comerciales emplean actualmente a 150.000 personas, mientras que las ventas de coches a particulares en enero se situaron en 28.000 unidades. "No nos salen las cuentas y difícilmente podremos pagar las nóminas de nuestros trabajadores", manifestó.
Faconauto advirtió además de que los coches que no se vendan ahora no pasarán en los próximos años por las instalaciones de posventa de los concesionarios, que hasta ahora era una actividad "refugio", por lo que será inviable mantener un taller oficial en ciudades de menos de 50.000 habitantes.
Los concesionarios, que realizan un esfuerzo promocional de 2.800 euros por coche, insistieron en reclamar al Gobierno un plan que incentive el achatarramiento de automóviles de más de diez años con una bonificación del 100% del impuesto de matriculación en los tramos del 4,75% y del 9,75%.
