MÉRIDA 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de UGT Extremadura, Francisco Capilla, ha asegurado que podrían peligran en la región 350 empleos directos de las plantas de Carcesa por la situación del Grupo Nueva Rumasa, perteneciente a la familia Ruiz-Mateos.
Cabe recordar que la Seguridad Social ha ordenado embargos preventivos de bienes propiedad de sociedades de la familia del empresario José María Ruiz-Mateos.
Así ha reconocido que hay "problemas muy serios" y ha incidido en que con los "embargos a proveedores" se está "acogotando claramente a la empresa".
De esta forma ha abogado porque todas las partes implicadas en esta situación realicen "todas las aportaciones" necesarias para que se puedan para salvar los puestos de trabajo.
"No nos podemos permitir el lujo en estos momentos de que se pierda ni un solo puesto de trabajo en nuestra la región", ha asegurado Francisco Capilla.
El secretario general del sindicato ha realizado estas declaraciones, a preguntas de los medios, en la inauguración de una jornada sobre la Ley de Extranjería.