CÁCERES, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
Varias familias cacereñas han pasado la noche en un hotel al tener que ser desalojadas tras el derrumbe de un muro exterior de revestimiento de una fachada lateral del edificio donde viven, que se vino abajo en la tarde noche de ayer, previsiblemente, por las fuertes ráfagas de viento y la intensa lluvia que cayó sobre Cáceres.
El derrumbe ha afectado también a una pared del garaje del edificio donde se ha abierto un boquete dejando a la intemperie parte de la planta subterránea del inmueble.
Se trata de cuatro viviendas colindantes con este lienzo del edificio situado en el número 3 de la calle Juan Ramón Jiménez, en el residencial Lope de Vega, en el barrio de La Mejostilla, que no podrán volver a sus casas hasta que sea reparado, según ha indicado la alcaldesa de la ciudad, Elena Nevado.
Nevado ha explicado que algunas de las familias han pasado la noche en casas de familiares pero unas 15 personas fueron alojadas en hoteles de la ciudad, mientras los técnicos revisaban el edificio para asegurarse de que la estructura no ha resultado dañada, por lo que el resto de vecinos sí podrán volver a sus casas.
Sin embargo, estas cuatro familias cuyas casas han resultado más afectadas no podrán ocupar sus viviendas hasta que no se regenere el muro exterior, según ha indicado la regidora cacereña, que ha añadido que el edificio accidentado tiene unos cinco años de antigüedad, fue construido por la empresa Provivesa y se trata de Viviendas de Protección Oficial (VPO) promovidas por la Junta de Extremadura.
Los técnicos municipales están trabajando en el terreno para saber cuál fue la causa del derrumbe que, "afortunadamente no provocó daños personales", ha subrayado la regidora cacereña que ha apuntado que los seguros del inmueble están en regla y ahora habrá que dilucidar cómo se lleva a cabo la reparación.
A la pregunta de si podría tratarse de un defecto de construcción, Nevado ha respondido que en ese caso "tendría que ser la empresa constructora la que se hiciera cargo de la reparación" pero ese término habrá que determinarlo cuando estén concretados todos los informes de los técnicos.
Dotaciones de bomberos y agentes de la Policía Local y Policía Nacional participaron en el operativo de desalojo del edificio y después se determinó que se evacuara a todos los inquilinos por si alguna vivienda podía resultar dañada por el agua y el viento.
Hasta la zona también se desplazó la alcaldesa y el teniente de alcalde, Valentín Pacheco, que transmitieron "tranquilidad" a los vecinos, según ha señalado Nevado que, por la mañana, también acudió a visitar a los afectados por un incendio en el barrio de Las 300 en el que también hubo que desalojar una vivienda.
Además, las numerosas lluvias caídas sobre la capital cacereña en las últimas horas ha provocado también el primer desembalse del pantano de Guadiloba, que se encontraba al cien por cien, y que ha tenido que abrir sus compuertas a las 10:30 horas de ayer domingo por primera vez en esta temporada para aliviar su capacidad.
"Ha sido un domingo muy intenso, pero afortunadamente no ha habido que lamentar daños personas y eso es lo importante", ha concluido la regidora a preguntas de los medios sobre este asunto tras la presentación de un festival infantil que se celebrará en la ciudad próximamente.
