Rural.- Galicia, Asturias, Cantabria y Euskadi defienden la continuidad del sistema de cuotas lácteas más allá de 2015

Actualizado: lunes, 4 agosto 2008 17:36

Las cuatro comunidades hacen frente común para reivindicar el carácter "estratégico" de la producción de alimentos ante la reforma de la PAC

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -

Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco consensuaron una defensa común del modelo agrario de las comunidades de la Cornisa cantábrica recogida en un documento que define su posición conjunta ante varios aspectos derivados de la reforma de la Política Agraria Común (PAC), sobre todo en cuanto a la redistribución social de las ayudas públicas y al mantenimiento del sistema de cuotas lácteas más allá de 2015.

La postura de las cuatro autonomías reivindica el carácter "estratégico" de la producción de alimentos y la necesidad de mantener mecanismos de regulación de sus mercados para "preservar" la permanencia de las explotaciones familiares del noroeste peninsular, cuya actividad se vincula a la vertebración social, económica y medioambiental de sus respectivos territorios.

Así lo expusieron hoy en Santiago los cuatro titulares de Medio Rural de las comunidades cantábricas, que trasladarán su posicionamiento a los gobiernos central y comunitario, así como a otros territorios del resto del Estado. Su objetivo es sumar "voluntades" para influir en la decisión final que adoptará la Comisión Europea en noviembre sobre el 'chequeo médico' de la PAC.

"Nuestra posición debería tener mucho peso en la del Estado", aseguró el conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, tras recordar que las cuatro comunidades registran el 80 por ciento de los agricultores y ganaderos de España, así como más del 60 por ciento de la cuota láctea del Estado. Esta consideración lo llevó a augurar un "amplio recorrido" del documento presentado hoy en todo el Estado y la UE, después de enmarcar la producción de alimentos en un debate mundial, "de coyuntura y de futuro".

El denominador común de los territorios cantábricos es, según sus responsables, una elevada dependencia de la agricultura y la ganadería, en concreto de la producción de leche y carne, así como su "singular" orografía, condiciones meteorológicos, dispersión territorial y estructura de la propiedad. En casos como el de Cantabria, esta última actividad representa casi un 90 por ciento de la producción final agraria, como apuntó su consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad, Jesús Miguel Oria.

CUOTAS Y AYUDAS

Los responsables de las cuatro comunidades coincidieron al exigir la continuidad del actual sistema de cuotas lácteas más allá de 2015 o, al menos, el aplazamiento de este debate hasta que se haga público el dictamen sobre el impacto de la desaparición de este mecanismo en junio de 2011. El grado de repercusión del 'aterrizaje suave' en las principales regiones productoras de la Unión Europea permitirá, según afirmó la consejera de Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Asturias, María Belén Fernández, dar "mayor certidumbre y garantías" al proceso. En caso de mantenerse la eliminación del control del cupo productivo, Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco demandarán la creación de un Fondo de la Leche, que garantice el futuro de la producción en estos territorios mediante una asignación que cubra las necesidades derivadas de la adaptaión a la nueva coyuntura. También reclamarán a la Comisión Europea una compensación económica para los ganaderos que hayan invertido en la adquisición de derechos de producción.

En esta línea, expresaron su "rechazo claro" al incremento lineal del 1 por ciento de la cuota láctea hasta 2015 para el conjunto de los estados miembros aprobado por el Ejecutivo comunitario. Por el contrario, defendieron una "cuota de convergencia" que acerque la capacidade de producción a las necesidades de consumo interno, tras recordar que España es deficitaria en este alimento del que se producen seis millones de toneladas pese a que la demanda del mercado nacional supera los nueve millones. Además, no aceptarán la desvinculación de fondos comunitarios dirigidos a primar la producción de alimentos para su inyección en políticas de desarrollo rural, al considerar que esta decisión conllevará un aumento del abandono de la actividad agraria y sólo beneficiará a las explotaciones de mayor tamaño y mejor adaptadas a las economías de escala. Por ello proponen una "redistribución" de los recursos financieros entre los estados y regiones. A este respecto, el consejero de Agricultura, Pesca y Alimentación del País Vasco, Gonzalo Sáenz de Samaniego, se refirió a las "oportunidades" que supondrá la reforma de la PAC con respecto a la capacidad que adquirirán las administraciones regionales para "articular" ayudas específicas que demanden los agricultores y ganaderos. En esta línea, citó la posibilidad de atender factores complementarios a la producción de alimentos, como la gestión territorial y de los valores socioculturales propios de cada territorio.