Un estudio de Caixanova ve en la elevada atomización empresarial un obstáculo para la internacionalización
VIGO, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El desarrollo tecnológico y las actividades innovadoras de los sectores del metal y la automoción de Galicia son "todavía insuficientes" para que puedan alcanzar una posición competitiva frente a las empresas de otras zonas geográficas, según un estudio de Caixanova dado a conocer hoy en Vigo.
El trabajo fue presentado por su director, Gregorio Gurriarán, y por el presidente de la entidad financiera, Julio Fernández Gayoso. Se trata de una síntesis de informes realizados por investigadores de la Universidad de Vigo en base al resultado de encuentros con representantes empresariales de los citados sectores y en los que también han colaborado instituciones de apoyo a la I+D+I.
Así, se ofrece un diagnóstico de la situación de las firmas gallegas de los ámbitos de la automoción y la metalurgia en el que se constata una mayor percepción de "barreras" a la innovación que de elementos "facilitadores". Entre otros escollos, se destacan los aspectos ligados al capital organizativo y relacional, así como el nivel de burocracia asociado a ayudas públicas y la carencia de suelo industrial.
En lo que se refiere a procesos de internacionalización, el trabajo afirma que "mayoritariamente existen oportunidades" tanto en el metal como la mecánica, pero se advierte de que los principales frenos residen en el "bajo conocimiento de dichos mercados y en la baja motivación del capital humano".
INNOVACIÓN
Entre las principales barreras para la innovación nombradas en el estudio, destaca la dificultad para la transferencia del 'know how' y tecnologías entre distintas actividades de la agrupación de la industria del metal y bienes de equipo o el escaso desarrollo de sistemas de vigilancia tecnológica e inteligencia competitiva.
Asimismo, se considera "insuficiente" el grado de disponibilidad del capital humano a nivel operativo en lo que se refiere a nuevas tecnologías. También se constata un bajo nivel de desarrollo en las innovaciones en el diseño modular de componentes y estructuras, así como en los modelos de gestión del conocimiento que fomenten la capitalización de la experiencia.
Al respecto de los "facilitadores", se señala la buena adecuación de infraestructuras, equipamiento y servicios de apoyo de los centros tecnológicos, el grado de orientación a la diversificación de mercados de las industrias auxiliares y de bienes de equipo y la incorporación de nuevos materiales a estos sectores.
Otros factores positivos están en el desarrollo de innovaciones en procesos y el "notable" grado de utilización de nuevas tecnologías.
INERNACIONALIZACIÓN
Los obstáculos para la internacionalización pasan por la elevada atomización empresarial y el insuficiente desarrollo de procesos de concentración de las distintas compañías. También se detecta un bajo desarrollo de la red comercial en los mercados exteriores, una insuficiente utilización del marketing y un inadecuado aprovechamiento de la inversión de empresas internacionales en Galicia para alcanzar acuerdos de cooperación.
Entre los aspectos positivos, se encuentra el "óptimo" nivel de apoyo por parte de la Administración para favorecer la captación y el mantenimiento de inversiones exteriores en la comunidad o el "notable" grado de incidencia de competidores en construcción naval, automoción y bienes de equipo procedentes de nuevos mercados.
De igual modo, también se constata el adecuado crecimiento de inversiones en el exterior por parte de empresas de síntesis, el "oportuno" desarrollo de inversiones exteriores en Galicia y la alta dependencia tecnológica de otros mercados.
METAL
La agrupación industrial de la mecánica y el metal en la comunidad está formada por un total de 10.680 empresas y genera 88.761 empleos. A Coruña y Pontevedra son las provincias donde tienen mayor presencia.
Según los datos recopilados en el estudio, en 2006 el sector generó un Valor Añadido Bruto (VAB) de 4.736 millones de euros, lo que supone el 11,66 por ciento del VAB total gallego.
Este tejido industrial tuvo una producción en 2006 de más de 17.200 millones de euros, de los que cerca de 8.600 fueron aportados por la automoción, 5.800 por las empresas de bienes de equipo y los 2.800 restantes por las actividades de construcción y reparación naval.
