González Couceiro destaca el uso del compost como fertilizante y de los suelos reciclados para recuperar zonas degradadas

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

La empresa González Couceiro trabaja en un proyecto que consiste en el aprovechamiento y la valorización de varios tipos de residuos no peligrosos y de carácter biodegradable como son los restos de poda de parques y jardines o los lodos procedentes de las industrias agroalimentarias para obtener dos productos con valor añadido, como son el compost o los suelos reciclados.

Para ello, esta firma especializada en la retirada y transporte de residuos sólidos urbanos y de carácter peligroso generados en distintas actividades empresariales, cuenta con el apoyo económico de la Consellería de Innovación e Industria. González Couceiro pensó en esta iniciativa, en colaboración con AIMEN, para "buscar una salida ambientalmente adecuada a algunos de los residuos que se gestionan en sus instalaciones".

Según explicaron a Europa Press fuentes de la empresa, al plantearse este proyecto tuvo en cuenta las "alternativas existentes" en la actualidad para el tratamiento de este tipo de residuos. Los lodos de depuradora se generan como consecuencia de los tratamientos realizados para reducir la carga contaminante de las aguas.

Entre las posibilidades de gestionarlos, Couceiro entiende que "la opción preferente", de acuerdo con el principio de jerarquía, es "el reciclaje de nutrientes", aunque previamente a su aplicación como fertilizante o enmienda orgánica es necesaria su estabilización mediante algún mecanismo de tipo biológico (compostaje aerobio o anaerobio), térmico (secado o pasteurización) o químico (encalado).

Por su parte, los restos de poda se han destinado tradicionalmente a la quema en las propias fincas aunque ésta no es una práctica muy recomendable por el peligro de incendios que puede suponer. González Couceiro subraya que "existe otra posibilidad de valorización", tanto de los restos de poda de parques y jardines como para los lodos de depuradora de la industria agroalimentaria, "que consiste en elaborar suelos reciclados".

BENEFICIOS Y APLICACIONES.

Para la empresa pontevedresa, esta iniciativa conlleva como principales beneficios y resultados "el desarrollo y puesto a punto de técnicas para la elaboración de compost y suelos reciclados a partir de un par de residuos concretos". De este modo, se consigue "un compost de calidad y composición controlada que cumple con los límites definidos en la legislación y la normativa de calidad".

En la elaboración del suelo reciclado, además de los residuos biodegradables, se emplea una elevada proporción de residuos inertes, con lo que se logra valorizar un tercer tipo de residuo y también se garantizará el cumplimiento de los valores legislativos.

También son destacables "los beneficios de carácter ambiental" que aporta el proyecto como son la disminución de residuos destinados a eliminación, el incremento de la materia orgánica en los suelos de Galicia y la contribución al cumplimiento de los objetivos de compostaje.

En cuanto a las posibles aplicaciones del compost, está su uso como fertilizante que aporta nutrientes principales (nitrógeno y fósforo), enmienda para suelos con carencias de materia orgánica en agricultura y como material base para la fabricación de sustratos para la jardinería pública o privada, en silvicultura o en restauración ambiental. Por su parte, los suelos reciclados pueden emplearse en la recuperación de zonas degradadas, como las canteras, y contribuyen a la minimización de los procesos de erosión.

González Couceiro también cuenta con la colaboración y el apoyo del Centro Tecnológico AIMEN para desarrollar este proyecto dada su experiencia en el campo de la investigación en procesos de valorización de distintos tipos de residuos y los recursos y medios materiales de los que dispone como son los diversos laboratorios y el equipo investigador ambiental.