27-M.-Quintana admite que la negociación está "trabada por ambas partes" y condiciona el pacto de A Coruña al autonómico

A CORUÑA, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

El portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, admitió hoy que las negociaciones con el PSdeG para establecer un acuerdo marco de gobernabilidad en los más de 70 ayuntamientos en los que el 27 de mayo abrió esta posibilidad "se están trabando por parte de las dos fuerzas políticas", pese a que gran parte de las ciudades dependen del éxito de las conversaciones.

En este sentido, en declaraciones a los medios de comunicación en A Coruña, Quintana reconoció que la coalición en la ciudad herculina, donde el PSOE quedó a tres concejales de la mayoría absoluta tras una hegemonía de 24 años, está a expensas de los contactos entre las comisiones de ambos partidos. "Para que se dé el pacto en A Coruña tiene que haber un acuerdo a nivel nacional", declaró.

No obstante, subrayó que "los negociadores están trabajando mucho y bien" y, tras apelar a "dejarles que hagan su trabajo", se mostró convencido de que el acuerdo marco "quedará finalmente determinado y dará paso las puntualizaciones que tiene que tener en cada ámbito local".

Además, eludió pronunciarse sobre las declaraciones en las que el secretario general del PSdeG y presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, calificaba las peticiones del BNG de "exageradas" y se limitó a mantener: "mejor que con esas declaraciones me quedo con otras en las que dijo que los negociadores están trabajando bien y que no debemos entrometernos desde fuera".

SIN CONDICIONES

En este sentido, garantizó que "el BNG no pone condiciones", si bien incidió en que los términos conveniados deben dar forma a "un acuerdo nacional básico que defina las características que, después, deberán ser especificadas en cada institución con su particularidad y representatividad".

Así, subrayó que todas las fuerzas políticas deben "atender a la voluntad de los ciudadanos" y reconoció que "es mala receta echarles la culpa de los resultados: ellos deciden y hay que asumirlo y gestionar lo que ponen sobre la mesa". No obstante, puntualizó que, en su opinión, "hay una voluntad en Galicia de que se conformen gobiernos de coalición estables y mayoritarios y el BNG va a trabajar en esa dirección".

Finalmente, después de que el alcalde electo de Lugo, el socialista Xosé Clemente López Orozco, declarase que prefería abandonar el partido a permitir una bicefalia con el BNG, Quintana se limitó a declarar que "es su opinión y hay que respetarla", si bien esperó "que no sea ése el camino final". "Él mismo, como se dice normalmente", concluyó.