LUGO, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
El abogado del promotor de la urbanización lucense de O Garañón, Javier Calvo, afirmó tras declarar como imputado ante la jueza Pilar de Lara que su cliente, Ricardo Iglesias, no tomó "ninguna decisión" y se limitó a aceptar "unas condiciones que le ponía el Ayuntamiento para poder desarrollar (el proyecto)".
Este abogado compareció este miércoles como imputado por un delito contra la ordenación del territorio ante la jueza Pilar de Lara en el marco de la causa en la cual también permanece imputado el secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro.
Tras permanecer en los juzgados lucenses en torno a dos horas, Javier Calvo afirmó que respondió a todas las preguntas que se le plantearon y que él se había limitado "a trabajar como abogado para redactar un convenio urbanístico y asesorar para hacer unas gestiones urbanísticas de desarrollo".
Así, sobre su imputación, apuntó que hubiera entendido "mejor" que hubiese sido llamado a declarar como testigo, aunque admitió que a lo mejor la jueza pudo entender que ello podría "generar algún conflicto con el cliente", el promotor Ricardo Iglesias, quien también está imputado en esta causa y a quien sigue representando.
Precisamente, cuando declaró ante Pilar de Lara, el promotor de las torres de O Garañón había explicado que no fue él quien se ocupó de los trámites previos para poder edificar en la parcela, sino que fueron sus abogados.
ACEPTAR LAS CONDICIONES O IR A PLEITO
Sobre su cliente, Javier Calvo se ratificó en que "decisión no tomó ninguna", salvo "aceptar unas condiciones que le ponía el Ayuntamiento para poder desarrollar o bien no aceptarlas e ir a pleito". "Entonces la decisión que tomó Ricardo fue esa: vamos a dejarnos de pleitos, vamos a aceptar las condiciones que nos fijan desde el Ayuntamiento y prepara el documento, redacta el convenio y listo", relató.
Además, el letrado explicó que su interrogatorio "se ciñó a cuestiones técnicas y jurídicas", de forma que contestó a preguntas que le formularon "sobre la compra del terreno, sobre la preparación de lo que es el convenio urbanístico, sobre la finalidad sobre la cual se hacía ese convenio y luego sobre cómo había sido la redacción del proyecto de urbanización y los problemas que hubo en el futuro".
DEFENSA DE BESTEIRO
Por su parte, el abogado de Besteiro, que estuvo presente en el interrogatorio a este abogado, comentó que "es una declaración que ha ido en la misma línea de las declaraciones anteriores".
"El abogado ha confirmado que el único interés que había por parte del ayuntamiento era reducir la edificabilidad y ganar zonas verdes para la ciudadanía de Lugo y que la edificabilidad ya venía de un plan anterior, es decir que no es una cuestión que se haya hecho un convenio para que se pueda edificar, sino para todo lo contrario: para reducir la edificabilidad y ganar zonas verdes", concluyó Candido Conde-Pumpido.
