VIGO 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
La junta directiva de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) condenó "rotundamente" el ataque con artefactos incendiarios sufrido en su vivienda de Vigo un empresario del sector metalúrgico, así como el ataque a un concesionario de Nigrán (Pontevedra) y a un cajero automático de la ciudad olívica, al tiempo que pidió "diálogo" y "realismo" en la negociación del convenio colectivo del metal.
La CEOE, que fue informada de los incidentes por el presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia, Antonio Fontenla, y por el presidente de la patronal pontevedresa, José Manuel Fernández Alvariño, condenó también "todos los actos vandálicos que han causado perjuicios muy importantes a las empresas y a la economía de la ciudad", en relación con las manifestaciones del sector del metal.
En ese sentido, expresó su "completo apoyo" al presidente de Instalectra, cuya vivienda fue atacada con cócteles molotov, e hizo extensivo ese apoyo a los representantes empresariales que están en la mesa de negociación del convenio.
Asimismo, esta organización pidió "realismo" en la negociación y recordó que "la vía para solucionar cualquier tipo de conflicto es la del diálogo, negociación y búsqueda de acuerdos". Por el contrario, apuntó, "los actos que no respetan las normas de convivencia y provocan disturbios sólo conducen a empeorar la situación".
La CEOE también precisó que "no es sensata" una revisión salarial por encima del 1 por ciento, cuando el IPC marca el -0,9 por ciento, y afirmó que la patronal "siempre ha garantizado el poder adquisitivo de los trabajadores", incluso en las circunstancias actuales, en las que "muchas empresas no están en condiciones de hacerlo".