CSI-CSIF denuncia la muerte de un funcionario de la cárcel de Teixeiro (A Coruña) durante una revuelta de presos

Actualizado: lunes, 17 julio 2006 17:59

Afirma que el desorden lo comenzaron presos "extremadamente peligrosos" que se autolesionaron

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -

El sindicato CSI-CSIF denunció hoy el fallecimiento del jefe de servicios del turno de noche del centro penitenciario de Teixeiro (A Coruña) durante una revuelta que tuvo lugar ayer con la implicación de internos "extremadamente peligrosos".

Según explicó esta central sindical, a la hora de la cena un total de siete internos de los nueve en régimen cerrado, conocidos como "extremadamente peligrosos", destinados en una galería del Módulo de Aislamiento, comenzaron a autolesionarse, "profiriendo insultos y amenazas" contra el personal de servicio.

Los internos lesionados fueron atendidos en la enfermería del centro. Sobre las 22.30 horas y, según señaló CSI-CSIF, con el fin de lograr el apoyo de la totalidad de internos del módulo, repitieron las autolesiones "negándose a ser curados y continuaron los insultos, amenazas y aporreo de puertas".

Una vez que el subdirector de seguridad se personó en el módulo donde se produjo el desorden, solicitó el auxilio de funcionarios que se encontraban libres de servicio, acudiendo al lugar doce de ellos, que restablecieron el orden. Los internos fueron curados de nuevo en la enfermería, salvo uno que necesitó ingreso hospitalario por un corte en el cuello, y distribuidos por otros módulos.

La central sindical subrayó que, "en plena virulencia del conflicto", el jefe de servicios del turno de noche "falleció víctima de una parada cardíaca, siendo inútiles los esfuerzos para recuperarle".

La situación, puntualizó CSI-CSIF, "está controlada" esta jornada, a la espera de que se produzca algún traslado de los internos "implicados más directamente" en la revuelta.

MASIFICACIÓN

El citado sindicato atribuyó hechos como el sucedido ayer a la masificación y falta de personal que tienen las cárceles españolas lo que provoca que el tratamiento que se le pueda dar a los internos sea "mínimo".

En este sentido, manifestó que se está pasando de un sistema penitenciario "moderno y tratamental" a uno "regimental" en el que, lamentó, "prima a la masificación y la falta de tratamiento que reconduzca la conducta de los internos hacia la socialización".

Ésta es la segunda revuelta que se produce en una cárcel gallega en el último mes, después de que el pasado 23 de junio se registrase otra en el penal pontevedrés de A Lama. En esa ocasión, la protagonizaron ocho amotinados de un módulo en el que habitualmente hay 24 internos.