Feijóo avisa de que la privatización del control aéreo en Peinador y Alvedro no puede "mermar la seguridad"

alberto nunez feijoo informa en rolda de prensa dos asuntos abordados na reunion
XUNTA/ana varela
Actualizado: jueves, 16 diciembre 2010 19:00

Celebra que el Gobierno no renuncie al AVE a Galicia, pero incide en que se cambió el sistema financiero y de licitación

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -

El jefe del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo, ha advertido este jueves de que la decisión del Ministerio de Fomento de sacar en 2011 a concurso la gestión del control aéreo en los aeropuertos de Peinador (Vigo) y Alvedro (A Coruña) no puede "perjudicar" la competitividad ni "mermar su seguridad y eficacia".

Lo ha advertido en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, donde el máximo mandatario autonómico ha hecho hincapié en que "en diez días" el Gobierno central ha decidido acometer acciones privatizadoras en el ámbito aeroportuario y en la Lotería Nacional, además de "cambiar" el modelo de financiación del AVE a Galicia, incrementando su apuesta por la fórmula público-privada.

"Es difícil, en diez días, encontrar más decisiones privatizadoras de las infraestructuras estratégicas", ha destacado Feijóo, quien ha manifestado su deseo de que ahora el PSdeG no vuelva a acusar "falsamente" a la Xunta de "privatizar" cuando es su partido "el que lo hace de verdad".

Con todo, en relación a la alta velocidad gallega, el presidente ha celebrado que, en la reunión que mantuvieron el lunes, el ministro de Fomento, José Blanco, le haya "confirmado solemnemente" la llegada del AVE en 2015, pese a los retrasos y a que otras ciudades como Cuenca o Huesca --a las que felicitó-- ya disponen de conexión pese a que "cualquier ciudad gallega tiene el doble o el triple de población".

Al tiempo, ha explicado que Blanco le trasladó que la "única fórmula" para cumplir el compromiso de llegada del AVE en plazo pasaba por modificar los sistemas financiero y de licitación, lo que --a su entender-- evidencia que la Xunta planteaba demandas en base "a realidades objetivas".