SANTIAGO DE COMPOSTELA, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
Galicia es la segunda comunidad autónoma con mayor número de personas sin hogar en relación a su población, al contabilizar 133 sin techo por cada 100.000 habitantes. Además, es la quinta en número total de personas en esta situación, al registrar el 8,3 por ciento de la población que no tiene casa del todo el Estado.
En el conjunto del Estado, la población sin hogar atendida en centros asistenciales de alojamiento y restauración ha sido de 22.938, de las cuales el 45 por ciento se quedó sin hogar porque perdió su trabajo, mientras que el 26 por ciento no podía hacer frente al pago del alojamiento, según el avance de resultados de la Encuesta a las Personas sin Hogar del año 2012 que publica este viernes el Instituto Nacional de Estadística (INE). Además, el 20,9 por ciento se debió a una separación de su pareja.
Tras Cataluña (21,3%), Madrid (15,4%), Andalucía (13,1%) y País Vasco (8,7%), Galicia es la quinta comunidad que concentra el mayor número de personas sin hogar, con el 8,3 por ciento. En el lado opuesto, se encuentra La Rioja (0,5%), Cantabria (1,1%) y Comunidad Foral de Navarra (1,4%), que registran los más bajos.
Por cada 100.000 habitantes, Galicia es la segunda comunidad con mayor número de personas sin techo, con 133. Por delante sólo se sitúa País Vasco, con 141,3 por ciento, además de las Ciudades Autónomas de Melilla (638,4) y Ceuta (549).
De esta manera, el dato gallego se sitúa muy por encima de la media estatal, que es de 71,3 personas por cada 100.000 habitantes y contrasta con la cifra de Castilla-La Mancha, que es la más baja de todo el Estado y se sitúa en 24,4 personas sin hogar en relación a esa masa poblacional.
PERFIL DE LA PERSONA SIN HOGAR
Al respecto de todo el Estado, el perfil de las personas sin hogar responde a un hombre (80,3%) y tiene menos de 45 años (57,7%). La edad media de los sin techo es de 42,7 años y el 54,2 por ciento son españoles. Además, cinco de cada diez personas sin hogar tienen hijos.
En cuanto a los servicios sociales, las personas sin hogar solicitan principalmente, alojamiento (60,2%) y comedor (67,3%), mientras que también demandan en un 53,6 por ciento requiere servicios de higiene.
El 89 por ciento sin hogar pernocta todas las noches en el mismo lugar. El 43,9 por ciento durmió en alojamientos colectivos. Entre los que duermen en lugares no previstos para el alojamiento (espacios público o alojamientos de fortuna), el 62,7 por ciento se asea en el centro donde acuden a comer y el 61,5 por ciento en baños públicos. El 54,6 por ciento lo hace en servicios de bares y restaurantes y el 34,7 por ciento en parques y descampados.
En cuanto a la formación, el 60,3 por ciento de la población alcanzó el nivel de educación de secundaria y el 22,2 por ciento los estudios primarios o inferiores. El 11,8 por ciento tiene estudios superiores.
FUENTES DE INGRESOS
Las principales fuentes de ingresos de la población sin hogar son las prestaciones públicas (Renta mínima de inserción, prestaciones por desempleo, pensiones contributivas y no contributivas y otros tipos de prestaciones públicas), que son percibidas por el 32 por ciento de las personas; el dinero que les da la gente de la calle (9,5%); los amigos o conocidos (8,3%) y las ONG (7,5%).
La Renta Mínima de Inserción (RMI), prestación pública más específica para personas con problemas de integración, es percibida por el 11,4 por ciento de las personas. Otro 6,5% recibe pensiones no contributivas.
Además, el 58,6 por ciento de las personas sin hogar declara tener buena o muy buena salud, mientras que el 14,2 por ciento la percibe como mala o muy mala.
El 30,7% de las personas manifiesta tener alguna enfermedad crónica, mientras el 16 por ciento de ese colectivo se ha clasificado en el colectivo de personas con algún trastorno mental. Además, el 15,2 por ciento tiene alguna discapacidad reconocida.
En cuanto a los hábitos de vida relacionados con la salud, el 86,4 por ciento de las personas sin hogar señala que no consume alcohol o lo hace ligeramente, y sólo un 4,1 por ciento manifiesta un consumo alto o excesivo de alcohol.
En relación con el consumo de drogas, el 62,7 por ciento dice que nunca ha consumido, y el 37,3 por ciento que lo ha hecho alguna vez. La proporción de mujeres que consumen (24,5%) es menor que la de hombres (40,5%).
Un factor importante asociado a las situaciones de vulnerabilidad y exclusión social de las personas sin hogar es su exposición a las agresiones o delitos, según explica el INE. Así, el 51% de las personas sin hogar ha sido víctima de algún delito o agresión. Los delitos y agresiones más frecuentes han sido los insultos y amenazas, robos y agresiones.