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SANTIAGO DE COMPOSTELA, 5 May. (EUROPA PRESS) -
Galicia registró un mes de abril normal en cuanto a temperaturas y seco en lo que respecta a las precipitaciones, ya que según los datos obtenidos en las estaciones más representativas de la Comunidad gallega, llovió de media un 32 por ciento menos de lo habitual en esta época del año.
Estas son las principales conclusiones del avance del último informe climatológico de MeteoGalicia, que subraya que el pasado mes de abril fue un mes tipicamente primaveral, marcado por la alternancia de periodos fríos y secos, alguna borrasca bastante activa en cuanto a precipitaciones y jornadas anticiclónicas de sol y calor, según ha informado la Xunta
Así, los días 7 y 8 la climatología estuvo marcada en la comunidad por el paso de la borrasca Diego, que dejó lluvias generalizadas y vientos intensos. Las jornadas del 11 y del 12 de abril también estuvieron caracterizadas por una situación similar, debido en este caso a la influencia de la borrasca Evelyn.
Por otro lado, tanto el comienzo como los tres últimos días del mes vinieron marcados por el predominio anticiclónico, que trajo a Galicia jornadas de cielos despejados, pero con temperaturas muy dispares.
Así, durante la primera semana de abril, se registró una entrada de aire muy frío procedente de Europa, que incluso dejó heladas importantes en el interior. Por el contrario, el mes remató con tres jornadas de sol y calor que ayudaron a compensar las temperaturas medias, que se movieron dentro de la normalidad.
La característica más destacable del mes hay que buscarla en los registros de lluvia. Así, la anomalía media en Galicia obtenida a partir de los datos de las 16 estaciones meteorológicas más representativas fue un 32 por ciento inferior al valor climático normal, siendo el precedente más próximo el del año 2017, durante el que llovió un 83 por ciento menos.
SAR Y XALLAS
Con carácter general, las precipitaciones acumuladas a lo largo del mes quedaron algo por debajo de lo esperado en esta época del año, ya que, a excepción de las jornadas marcadas por las mencionadas borrascas, el resto del periodo se registraron lluvias irregulares.
Los valores absolutos más elevados se alcanzaron en las comarcas del Sar y del Xallas, en que se contabilizaron localmente hasta 241 l/m2. Por el contrario, los valores de lluvia más modestos de toda la comunidad se produjeron en Valdeorras, con alrededor de 14,3 l/m2.
ANOMALÍAS MEDIAS
En cuanto a las anomalías medias por zonas, el porcentaje más alto de precipitaciones en comparación con los valores del periodo de referencia (1981-2010) se registró en la Baixa Limia, donde llovió hasta un 75 por ciento por encima de lo normal. La más baja, en las comarcas de Ferrol y Ortegal con un 94 por ciento menos de lluvia.
En lo que respecta al comportamiento de las temperaturas, y según los datos de las estaciones meteorológicas más representativas, las medidas alcanzadas en el conjunto de Galicia se movieron en valores dentro de la normalidad. De hecho, los meses de abril de los años fueron más cálidos que este.
Con todo, hubo contrastes notables desde el punto de vista término entre las distintas zonas de la Comunidad. Así, las anomalías negativas más significativas se detectaron en el interior de la comarca de Lemos y en Verín, en que la temperatura media quedó cerca de los 0,9 grados por debajo de lo esperado.
Por el contrario, los valores más altos registrados en el mes de abril fueron los de Lugo, comarca en que los termómetros se situaron, de media, hasta 1,6 grados por encima de lo habitual.