SANTIAGO DE COMPOSTELA, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de profesores acreditados que aspiran a cátedra en la Universidade de Santiago de Compostela han irrumpido este martes en la reunión del Consello de Goberno de esta institución para solicitar la convocatoria inmediata de 50 plazas de catedrático.
En la mañana de este martes este colectivo acudió al Pazo de San Xerome para interrumpir momentáneamente la reunión del Consello de Goberno de la USC, donde se leyó un manifiesto en el que denuncian que el proceso lleva paralizado "desde hace seis años".
Los afectados señalan que a diferencia de la "salida masiva de plazas" de modo paralelo a la salida de titularidades de universidad en otros puntos del Estado, llegando hasta 42 en Barcelona (que anunció 30 más para 2016), la USC "no convocó" ninguna, lo que "profundiza más" en las "grandes diferencias" de ratio de catedráticos-profesor respecto a otras instituciones.
En total el número de profesores acreditados asciende a más de 150, según denuncian, y el colectivo reivindica la "necesidad de promoción" y el "orgullo" y prestigio que representa el número de catedráticos para una universidad, sobre todo en términos de representatividad en distintos estamentos nacionales e internacionales que tengan en cuenta esta condición.
También han recordado que los acreditados a partir de junio de 2010 no han contado con una convocatoria de plazas vinculadas con su promoción, con excepción de dos en 2014 durante el mandato del rector Casares Long. Una situación provocada "por la restrictiva tasa de reposición que ahora ya no afecta al colectivo".
"NO SE COMUNICA CON NOSOTROS"
Por todo ello, han solicitado al Consello de Goberno "que exija a la Reitoría una planificación decidida que rompa con la obstrucción existente en el acceso a cátedra" y "contrarreste de forma inmediata el castigo al colectivo".
Las demandas apuntan a una convocatoria de "un mínimo de 50 plazas" para este año que deberá mantenerse en ejercicios sucesivos "hasta que se normalice la situación". A ello, han añadido que el coste real de la promoción permitiría convocar siete promociones a cátedra con cada catedrático jubilado, que calculan en cerca de 50 desde 2010.
Santiago Ortiz, uno de los docentes presentes, criticó la actitud del rector Juan Viaño tras lectura del texto ante las peticiones de los acreditados a catedrático. "No se comunica con nosotros, no tuvo el detalle ni la educación de decirnos algo, darnos alguna esperanza. Demuestra la importancia que la Reitoría le da a este problema y en función de eso tendremos que seguir con acciones más contundentes".
PRÓXIMA REUNIÓN
En todo caso, la Universidad de Santiago remite a los afectados a la próxima reunión convocada para el día 11 de marzo en la que se atenderán sus demandas. En declaraciones a los medios, el vicerrector de Comunicación, José Pereira, ha argumentado en que el Consello de Goberno, con un orden del día ya establecido, "no parece adecuado" para articular ese debate teniendo en cuenta que ya hay un encuentro convocado con el colectivo.
Pereira ha señalado que las 50 plazas anuales que solicitan supondrían "unos tres millones de euros" para la USC, y que el propio Claustro en diciembre avaló que se priorizen para este año la estabilización del profesorado y la contratación de docentes "donde sea necesario, además de que "en la medida de lo posible" se puedan iniciar procesos de promoción a lo largo del periodo 2017-2018.
También quiso aclarar que la normativa en España considera la cátedra una plaza nueva, y no promoción, recordando además que al ser un proceso libre se pueden presentar cualquier aspirante del Estado.
Esto obliga a la USC a dotar 60.000 por plaza y a "priorizar", sobre todo tras el apoyo del claustro y la situación económica de la institución académica, "que no es buena".
A pesar de ello, ha reiterado que la previsión para el año 2017 y para 2018 es dotar recursos de personal a promoción. El número exacto de plazas dependerá de la evolución del Plan de Financiación y del Plan de Reequilibrio Financiero de la USC, aunque ha reconocido que la petición de 50 anuales "está lejos" de los cálculos.
SITUACIÓN EN CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
A renglón seguido y en la línea de priorizar los recursos para dotar de profesorado, Pereira se ha referido al problema de Ciencias de la Educación, donde los alumnos mantienen un encierro desde hace una semana para reclamar esa dotación de docentes que necesita la facultad para poder impartir clases con normalidad.
El retraso en la contratación de profesores asociados ha provocado "una situación incómoda" para los estudiantes, con docencia sin impartir, aunque Pereira ha señalado que "ya no hay ninguna materia que no se esté impartiendo". De las 24 previstas, todavía están pendientes de incorporar unas nueve plazas.
A los alumnos se han unido los profesores de la facultad y la propia decana, que protagonizaron este lunes un acto de protesta junto a alumnos de Filosofía, que también critican falta de docentes, en el que reivindicaron además una bajada de tasas o denunciaron problemas estructurales.