Interceptan a cuatro conductores ebrios en menos de tres horas por conducción negligente en el casco urbano de Ourense

OURENSE 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

Cuatro conductores con edades comprendidas entre los 21 y los 39 años fueron interceptados la pasada madrugada por la Policía Local de Ourense cuando circulaban de forma negligente y en estado ebrio por el casco urbano de la ciudad. En todos los casos duplicaron la tasa de alcoholemia máxima permitida.

Según informó hoy la Policía Local, el primer suceso se registró a las 2.50 horas en la calle Emilia Pardo Bazán, frente al Auditorio Municipal de la capital ourensana. Una patrulla policial observó cómo un conductor de 39 años, que circulaba en un Peugeot 407, se saltaba un semáforo en rojo por lo que decidió interceptarlo. Los agentes apreciaron que se encontraba bajo los efectos del alcohol, por lo que decidieron someterle a las pruebas de alcoholemia, donde duplicó la tasa máxima permitida.

Poco después, a las 4.00 horas, los agentes interceptaron a un joven ciclomotorista de 28 años edad, que circulaba sin casco a bordo de un ciclomotor Peugeot Jetta, a la altura del número 1 de la calle Concejo de la ciudad.

Una patrulla policial decidió darle el alto y observó que presentaba síntomas de haber ingerido bebidas alcohólicas, por lo que le sometieron a las pruebas de alcoholemia, donde superó en más de dos veces la tasa máxima permitida.

El tercer incidente se produjo quince minutos después, sobre las 4.15 horas en la calle Progreso, cuando una patrulla policial observó a un conductor salía de la gasolinera de esta zona de la ciudad sin respetar la línea continua ni el semáforo el rojo. Por todo ello, la Policía Local dio el alto al vehículo, un Opel Vectra, y sometió a su conductor, un joven de 24 años, a las pruebas de alcoholemia, donde duplicó la tasa máxima permitida.

Por último, sobre las 5.20 horas, otra patrulla detectó a un conductor circulaba con un turismo, un Volkswagen Polo, sin luces y que en un cruce, se le calaba continuamente.

Los hechos tuvieron lugar en la intersección de la calle Curros Enríquez con la Avenida de la Habana. Los agentes lo interceptaron y sometieron al conductor del turismo, un joven de 21 años, a las pruebas de alcoholemia, donde también duplicó la tasa máxima permitida.

En los cuatro casos, la Policía Local denunció a los conductores por circular en estado ebrio y ordenó el traslado de los vehículos al depósito municipal.