PONTEVEDRA, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional de Pontevedra alerta a la ciudadanía sobre la presencia en la ciudad de un falso instalador de gas que, según la denuncia de una vecina, acudió este jueves a una vivienda particular para realizar una revisión y que, después de manipular las conducciones, le cobró a la propietaria 47,88 euros.
Los agentes advierten de que se trata de una estafa, por lo que recomiendan verificar la identidad de cualquier supuesto técnico que se presente con esa finalidad.
La denuncia presentada relata que el falso técnico se presentó a las 17.00 horas en ese domicilio y le advirtió a la mujer de que si no accedía a la revisión se enfrentaba a una sanción de 20.000 euros. Antes de permitirle la entrada en la casa, el hombre le mostró una identificación, por lo que la propietaria de la vivienda --"asustada", según los agentes-- le autorizó a realizar el supuesto trabajo.
Tras manipular la instalación durante un rato, la denunciante le abonó la cantidad que le pidió y le solicitó una factura. El hombre le solicitó entonces un folio y le anotó allí mismo un número de teléfono que identificó como de atención al cliente y un supuesto número de operario, añadiendo que su nombre era Carlos y que tenía 25 años.
Fuentes de la Policía Nacional de Pontevedra advirtieron que esta "estafa del gas" que nuevamente vuelve a detectarse en la ciudad está protagonizada habitualmente por dos o más personas que suelen personarse en los domicilios de personas de edad avanzada con la supuesta excusa de revisar las conducciones de gas y realizar reparaciones innecesarias por las que cobran. En algunos casos, incluso llegan a ofrecer contratos falsos de mantenimiento por un plazo de cinco años.
Los agentes alertan de las intenciones de estos falsos instaladores cuya única finalidad es obtener "lucro personal". Por ello, insisten en que se compruebe su verdadera identidad, aunque se presenten con un acreditación que los vincule supuestamente a una empresa de gas.
Con todo, la Policía Nacional recomienda tener en cuenta el nombre de la empresa con la que se tenga contratada la instalación de la vivienda y no aceptar a supuestos trabajadores de presuntas empresas diferentes a la del usuario.
