LUGO, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
El joven de 18 años vecino de Burela que fue sorprendido por el radar en Vilalba (Lugo) cuando circulaba a 217 kilómetros por hora en la Autovía del Cantábrico fue condenado a estar dos años privado de carné de conducir y a abonar una multa de 1.200 euros.
La sentencia fue dictada hoy tras un acuerdo de las partes, según confirmaron a Europa Press fuentes judiciales, en un juicio rápido celebrado en el Juzgado de Instrucción Número 1 de Vilalba.
Así, al conductor novel, S.G.C., le impusieron una multa de cuatro euros al día durante 10 meses de multa, 60 días de servicios en beneficio de la comunidad y la retirada durante dos años del permiso de conducir.
El vehículo que conducía, un Opel Corsa Sport, fue interceptado por un radar en el punto kilométrico 578 entre Vilalba y Baamonde, punto donde la autovía del Cantábrico enlaza con la autovía A-6.
Al joven le fue imputado un delito contra la seguridad del tráfico, puesto que no podía superar el límite de ochenta kilómetros por hora establecido para conductores noveles.