SANTIAGO DE COMPOSTELA, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Consellería de Sanidade reconoció hoy que existe una "sobrecarga" y "saturación" en los servicios de urgencias de los hospitales públicos gallegos "pero no colapso", que atribuyó a las "carencias asistenciales heredadas" y aseguró que el incremento de la asistencia no supuso el aplazamiento ni suspensión de operaciones programadas.
Así, en declaraciones a Europa Press, el director xeral de la División de Asistencia Sanitaria del Servizo Galego de Saúde (Sergas), Julio Villar, calificó de "habitual" la situación en los servicios de urgencias que, según recordó, "todos los años registran sobrecarga que genera problemas asistenciales y esperas prolongadas".
En este sentido, Villar apuntó que en el último año, como es habitual todos los años, el número de urgencias atendidas en los hospitales de la red del Sergas registró un aumento del 2,2% al pasar de 1.081.000 en 2005 a 1.105.000 el ejercicio pasado en toda la comunidad gallega.
Además, indicó que, según los datos contabilizados la pasada jornada, los hospitales gallegos atendieron una media de urgencias que se sitúa dentro de "lo habitual" aunque con "leves" incrementos en algunos casos. Así, precisó que el Hospital Xeral de Vigo sumó 378 urgencias, con el 12,7% de ingresos; y el Meixoeiro 205, con un 14% de ingresos, mientras que la frecuentación "fue normal" en el Complexo Hospitalario de Pontevedra.
CARENCIAS
El director xeral destacó que el sistema público gallego "tiene que cambiar y mejorar" pero subrayó que, a pesar de las carencias estructurales actuales, "es capaz de dar respuesta".
Por ello, insistió en que esas carencias estructurales se hacen patentes cuando se registra un "leve" incremento del nivel asistencial por la "falta de espacio", por lo que llamó a la población a hacer "un uso racional" de los servicios de Urgencias y recomendó que se acuda a los centros de salud de Atención Primaria para evitar la saturación.
No obstante, reiteró que los "casos urgentes" son atendidos con rapidez y otras patologías requieren esperas prolongadas al priorizar a los pacientes más urgentes.
JUAN CANALEJO
Por su parte, el director-gerente del Complexo Hospitalario Juan Canalejo de A Coruña, Luis Vicente Sánchez, comentó en, declaraciones a Europa Press, que "existe una utilización importante" de Urgencias por parte de la población pero calificó de "excesivo" hablar de colapso, por lo que lanzó un "mensaje de tranquilidad" a la población.
De este modo, aseguró que se lleva a cabo una labor de revisión de los ingresos y hay altas "suficientes" para que ingresen nuevos pacientes. Además, indicó que hubo un pico en el nivel asistencial de urgencias pero precisó que se produjo un refuerzo de enfermeras y personal de enfermería en los servicios.
El Juan Canalejo atendió la pasada jornada 476 urgencias, y el lunes 525 por lo que, según el director-gerente, se mantienen "unos niveles elevados" y añadió que se espera que estos "remitan". No obstante, apuntó como medidas adoptadas la agilización de las altas, consultas de alta resolución, la ausencia de demoras en pruebas de laboratorio ni análisis.
En esta línea, el Hospital Clínico de Santiago, que en 2006 registró una media de 443 urgencias diarias, registró la pasada jornada 497 pacientes en este servicio. Según precisaron fuentes sanitarias, la asistencia "es normal" en el centro compostelano.
Por su parte, el Comité de Centro del Juan Canalejo reclamó hoy que se optimicen las medidas y el personal para paliar una situación que consideran "insostenible" y que, según precisó, se remonta a 2003. Al respecto, demandan "más espacio" para la atención de urgencias para tratar de paliar la situación.
CHOP
Asimismo, el Comité de Centro del Complexo Hospitalario de Pontevedra (CHOP) denunció la situación de colapso que sufre en los últimos tres días el servicio de urgencias del Montecelo. Así, la portavoz del comité, Begoña Agrelo, denunció que hay "pacientes por los pasillos, gente largas colas e interminables horas de espera, ambulancias paradas a la entrada sin camillas en las que bajar a los enfermos, y salas de espera abarrotadas".
"Pontevedra no se merece esta sanidad, es la peor calidad asistencial de toda Galicia", afirmó Begoña Agrelo. Además, según el Comité de Centro, la dirección del CHOP está "claramente superada por los acontecimientos" y es "incapaz de resolver este caos".
Por su parte el director asistencial del Complejo Hospitalario de Pontevedra, José María de Lis, rechazó que exista "caos" pero admitió "un exceso de enfermos". "Hemos tenido durante los tres últimos días una afluencia mayor de lo que es normal", precisó.
"Generalmente rondamos las 200 urgencias diarias y durante estas fechas, por la gripe, el frío y los días que han sido del año ha habido un mayor número de enfermos, por lo que se produjo un cierto retraso en la atención en urgencias", explicó.
"Las urgencias se atienden todas, lo que pasa es que hay un triaje, una selección de enfermos, y a los pacientes graves se les atiende de inmediato", aseguró el director asistencial y explicó que "hay que saber que el 80% de los enfermeros que siguen llegando, incluso estos días siguen sin el volante del médico". Por ello, insistió en que los enfermos "no usan adecuadamente el servicio de urgencias y lo emplean para todo"