Reclaman que las entidades se hagan cargo de los pagos si algún prejubilado pierde la prestación por desempleo
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 23 Sep. (EUROPA PRESS) -
Sindicatos y cajas continúan las negociaciones para alcanzar un acuerdo laboral en la fusión de Caixa Galicia y Caixanova y buscan ahora un punto común para establecer las "garantías" para las prestaciones que recibirán los trabajadores que se acojan al expediente de regulación de empleo (ERE) por el que se tramitarán las 1.200 prejubilaciones que se prevén.
A su salida de la reunión de este jueves, en la que se analizó un documento escrito redactado por las cajas y que se presentó el pasado martes a los sindicatos con una propuesta conjunta (CC.OO., Csica y CIG, que son los mayoritarios) y se dio a conocer hoy a UGT y CGT, los responsables de las tres primeras formaciones han afirmado que lo que está sobre la mesa es un ERE pero que quedan cuestiones por puntualizar. De hecho, han considerado que el acuerdo no estará cerrado el día 30 --próximo jueves, fecha del próximo encuentro y plazo que se dieron las cajas para tener un pacto laboral--, sino en los primeros días de octubre.
Por su parte, el responsable de UGT, José Ramón de Pliego-Valdés, ha destacado que el documento presentado "no les gusta ni a los que lo han pactado" y ha señalado que este sindicado, del mismo modo que CGT, no apoyará un expediente de regulación de empleo.
Así, el representante de CC.OO. en la negociación, Luis Mariño, ha explicado que el texto necesita ser "perfilado" debe incluir "garantías". Para la próxima reunión, ha dicho, buscarán con Csica y CIG hacer un documento conjunto. "Estamos ya cerca del final del proceso", ha afirmado para agregar que el acuerdo "a falta de cerrar muchos temas, en general, convence" al sindicato.
Mariño ha reafirmado que "habrá un ERE", tras el que los trabajadores mayores de 55 años que se acojan voluntariamente al mismo, seguirán percibiendo el 85% de su salario bruto anual. Además, ha dudado de que "dé tiempo" para el próximo jueves de firmar un acuerdo, aunque sí confía en "finalizar la redacción" para entonces.
En relación con que, al ser mediante ERE, los trabajadores quedarán desvinculados de la empresa, ha indicado que "no hay otra fórmula" y que, en caso de que esas personas sean llamadas a algún trabajo que rechacen y pierdan la prestación por desempleo, las cajas "cubrirán" esa parte.
PARO Y PAGO DE LAS CAJAS
En este punto, el representante de la CIG en la mesa laboral, Clodomiro Montero, ha aclarado que los prejubilados recibirán el paro por lo cotizado en los años de trabajo y, con dinero de las cajas, se "mejorará" esa prestación, hasta que alcance el 85% del salario bruto. Si el trabajador pierde la prestación por causa no achacable a él mismo, las cajas "tienen que asumir" esa parte, ha defendido y ha apuntado que las entidades son "proclives a que quede atada esa garantía" pero CIG no está de acuerdo con la redacción de este punto.
Montero ha insistido en la necesidad de continuar negociando "todos los apartados", pues el texto elaborado por Caixa Galicia y Caixanova, tal como está actualmente, "no vale". "Lo que hay ahora encima de la mesa es inasumible", ha avisado.
Para el sindicato nacionalista la negociación de un ERE es "independiente" de la mesa laboral. De hecho, ha llamado la atención acerca de que el número de empleos que se destruirán, 1.200, es una cifra que estaba "prefijada y era inamovible" en las conversaciones. "Lo que hacemos los sindicatos es negociar un acuerdo laboral para minimizar el impacto de esa decisión política y de las cajas, no negociar un ERE", ha destacado.
EL ERE "NO PERJUDICA A NADIE"
En nombre de Csica, Juan Álvarez ha afirmado que en los puntos básicos, los tres sindicatos que presentaron propuesta conjunta y las cajas están "totalmente de acuerdo", pero "flecos quedan muchísimos". "Si no quedan ajustados ahora la interpretación de la empresa puede ser nefasta para nosotros", ha advertido, por lo que ha defendido que es necesario "parar para hacer un escrito y presentarlo a la empresa", a la espera de que el próximo jueves den "una solución definitiva".
El hecho de que los despidos se tramiten a través de un ERE tiene una "doble implicación", dado que la caja "se ahorra una serie de dinero que va a pagar el desempleo" y los trabajadores no tienen obligación de declarar una parte del importe que percibirán, por lo que obtienen una ventaja fiscal. "No perjudica a nadie", ha defendido y ha indicado, como CC.OO. y CIG, que una de las garantías que negocian es que las cajas cubran las cantidades a percibir en caso de que algún trabajador pierda el desempleo.
Además, Álvarez ha explicado que el acuerdo para los traslados fija una cantidad que se abonará al empleado por cada kilómetro, a lo que se sumará, durante dos años, una cantidad de 7.500 euros anuales para alquiler y la posibilidad de pedir por segunda vez un préstamo hipotecario para compra de vivienda. "Éste es un tema cerrado", ha dicho, salvo por que aún se desconoce cuánta gente será trasladada.
DOCUMENTO CON "CARENCIAS"
Por su parte, el responsable de UGT en la mesa laboral, José Ramón de Pliego-Valdés, ha considerado que la propuesta conocida este jueces "tiene muchas carencias" y no garantiza la continuidad de quienes trabajan en las cajas con contratos que no son indefinidos. "Se habla de bolsas --listados de personas para su contratación preferente-- para quienes tienen contratos de relevo, que no son menos de 50 en Caixa Galicia", ha explicado.
De Pliego-Valdés ha manifestado que CC.OO., Csica y CIG tienen "encauzado" el acuerdo con las dos entidades "y lo van a firmar", aunque ha avanzado que a UGT no le vale y no se adherirá a un pacto que incluya un ERE. Asimismo, ha censurado que algunos asuntos, como los cierres de oficinas, se "dirimirán en comisiones posteriores sólo para los firmantes".
En representación de la CGT, Antonio Rosales, ha dicho que tampoco respaldarán un expediente de regulación de empleo, aunque tiene "clarísimo" que este pacto "se va a firmar.
Además, la próxima semana, CC.OO., Csica y CIG harán asambleas informativas con los trabajadores en Ourense y Vigo, mientras que UGT celebrará encuentros por toda Galicia entre esta semana y la siguiente.
