La solidaridad se viste de Navidad para que más de 100.000 gallegos tengan alimentos y "no haya un niño sin juguetes"

Espacio infantil con juguetes
EUROPA PRESS
Actualizado: sábado, 23 diciembre 2017 12:59

Recogidas solidarias de juguetes, campañas de alimentos y esfuerzos redoblados en los comedores sociales para afrontar estas fechas

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -

La luz que caracteriza la época navideña pone más en evidencia las zonas de sombra que quedan en la sociedad. La situación de personas sin recursos, familias en riesgo de exclusión social o niños y mayores que viven en centros institucionales despiertan de forma especial en estas fechas la solidaridad de los gallegos, que unen esfuerzos para que más de 100.000 personas tengan alimentos y que "no haya un niño sin juguetes".

Aunque las iniciativas de recogida de alimentos, las más clásicas, siguen siendo prioritarias, las que se centran en dar una navidad normalizada a niños de familias en riesgo de exclusión social o en centros de acogida son cada vez más populares y ganan adeptos.

Este es el caso de la Fundación Amigos de Galicia, que entregará este año más de 2.000 juguetes a niños de familias necesitadas gracias a la colaboración de distintas entidades, como el Instituto Torrente Ballester, que han participado en la recogida solidaria, y de la propia sociedad, que ha colaborado donando y ayudando a envolver estos regalos.

También Cruz Roja ha realizado en Galicia, al igual que a nivel nacional, una campaña de recogida de juguetes nuevos, no bélicos y no sexistas, que entregará a familias derivadas por los servicios sociales con el objetivo, entre todas las entidades, de que no haya en Galicia "un niño sin juguetes" esta navidad.

Cáritas, que despliega en sus diferentes entidades parroquiales todo un programa de iniciativas relacionadas con la solidaridad en Navidad, promueve también la recogida de juguetes para niños en riesgo de exclusión social, como es el caso de la ciudad de Lugo.

ELFOS Y CALCETINES

No obstante, la mayor iniciativa en Galicia de recogida de juguetes para estas fechas es la que realiza de forma institucionalizada desde 2012 'Elfos y Calcetines', una entidad social dedicada a poner en contacto a niños en situación desfavorecida y personas con deseos de llevar la magia de la Navidad a cada rincón.

El año de su nacimiento, en 2012, el proyecto llegó a 100 niños residentes en casas de acogida o centros o pertenecientes a familias en riesgo de exclusión. En 2016, la iniciativa se amplió a personas mayores que pasen sus fiestas en centros institucionales.

La idea, apuntan sus responsables a Europa Press, es que ninguna de estas personas se quede sin recibir un regalo bien en Navidad, bien en Reyes, a través de la solidaridad de voluntarios que reciben la carta de su 'calcetín' y entregan su donativo envuelto en un 'punto elfo'. La forma más parecida a convetirse en Rey Mago cuenta con una gran "aceptación social" y, de hecho, las plazas de voluntarios este año se llenaron en apenas 10 días.

El crecimiento de esta iniciativa demuestra que la solidaridad en Galicia es muchas veces superior a la que piden las entidades. De los 100 participantes de hace cinco años, los 'elfos' llevarán esta Navidad regalos a más de 3.000 niños y adultos de entornos desfavorecidos o residentes en instituciones.

ALIMENTOS PARA 100.000 GALLEGOS

Más de 100.000 gallegos en riesgo de exclusión social verán mejoradas sus Navidades gracias a la solidaridad canalizada a través de los Bancos de Alimentos de Galicia, que trabajan a pleno rendimiento en los últimos días del año.

Comedores sociales, ONG y servicios sociales son los principales destinatarios de los alimentos que los distintos Bancos de Alimentos distribuyen todo el año, una actividad especialmente relevante con la llegada de la Navidad.

En total, las existencias de estas entidades permitirán ayudar a unas 100.000 personas en la Comunidad a nivel alimenticio, gracias en buena medida a la Gran Recogida de Alimentos que, como es tradicional, se realizó a principios de diciembre.

En esta recogida, como ejemplo, bancos como el de Vigo recabaron 300.000 kilos de alimentos, mientras que el de Rías Altas se hizo con 410.000 (70.000 de ellos solo en Santiago y Barbanza) y el de Pontevedra con 110.000 kilos.

Aunque los almacenes siempre albergan productos no perecederos, como pastas, arroces o aceite, las entidades, agrupadas en una federación, piden en las campañas que los donantes no se olviden de productos como leche, gallegas, cacao o alimentos para niños.

Además, desde los bancos apuntan a que en estas fechas siempre reciben donativos de productos de época como turrones, polvorones o chocolates que buscan "hacer más normalizadas" las fechas para las familias que pasan por dificultades.

MENÚS ESPECIALES EN LAS COCINAS ECONÓMICAS

Las cocinas económicas de las ciudades gallegas, como ya es tradicional, también redoblan sus esfuerzos durante los días señalados de la Navidad, con más servicios y menús especiales.

"Buscamos hacerlo lo más bonito posible, que las comidas estén ricas, sean abundantes y variadas", ha dicho, en declaraciones a Europa Press, Sor Esther, de la Cocina Económica de Santiago, que ya trabaja cerrando pedidos y menús para los días más señalados, al igual que los centros de las otras ciudades.

En total, en Compostela calculan hacer unas 170 comidas y 150 cenas en estas fechas y apuntan que, aunque normalmente no se sirven cenas los domingos y festivos, en este caso el centro trabajará tanto el día de Nochebuena como el de Fin de Año. El día de Reyes harán, además, un regalo a los usuarios.

Sor Esther ha destacado como durante estas fechas aumentan los "donativos monetarios" de empresas, así como la cesión de productos por parte de compañías y de particulares. "Tenemos mucha colaboración", ha apostillado.

En la actualidad, la cocina económica de Santiago ha visto disminuido su número de usuarios con respecto a los peores años de la crisis, apuntan sus responsables, con unos 70 comensales para desayunos, 150 en comidas y sobre 100 para la cena.

UN HOGAR EN LOS ALBERGUES

También la Navidad redobla los esfuerzos en otros centros de solidaridad, como es el caso del Albergue de Juan XXIII, en Santiago de Compostela. "Es un momento que nos parece importante que los usuarios sientan que con la Navidad todo cambia un poquito, que sientan que tienen una familia alrededor de ellos", ha dicho el responsable de esta entidad, Fray Joaquín Pulleiro, que vive estas fechas con dedicación.

A estas alturas del año y en Galicia, indica Pulleiro, no hay un "aumento significativo" de personas sin hogar, dado que se desplazan a lugares más cálidos. No obstante, los usuarios "se quedan más tiempo" y la actividad se desarrolla bajo el "protocolo de frío", que se activa cuando la temperatura baja de dos grados. Del total de plazas existentes, ha apuntado, el centro afronta la Navidad con casi 10 disponibles para acoger a quien lo necesite.