Reafirma la "voluntad" del PSOE de trabajar en "colaboración" con los ayuntamientos y Gobierno central por "una Galicia de libertad"
OURENSE, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario xeral del PSdeG y candidato a la reelección como presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, comprometió hoy en Ourense la creación de 90.000 cursos de formación al año para desempleados e incentivos para pymes, con el fin de que puedan conseguir 20.000 nuevos contratos.
En declaraciones a los medios tras un paseo por una céntrica calle ourensana, el dirigente socialista garantizó que, si resulta vencedor en las urnas del 1 de marzo, la crisis "no la pagarán los que no la causaron", es decir, los trabajadores y los pensionistas, puesto que su gobierno dará "ayudas" a la "amplia mayoría social que tiene ganas de ganar el futuro".
Además, enfatizó que su "ocupación y preocupación" pasan por "recuperar la economía, salvar el empleo y apoyar a los trabajadores y las familias". "Es nuestro compromiso y tarea", proclamó, y, con estas premisas, pidió el voto a los que apuestan por una Galicia "libre de peajes y de caciques, por un país de libertad, futuro y derechos".
Así, contrapuso la Galicia actual, que es "de todos los gallegos", con la que "antes" pertenecía al PP y a Manuel Fraga". "Antes era resignada y pasiva, ahora es activa y quiere un mejor futuro, antes era la Galicia de la abstención, ahora será la de la movilización y la participación para que el cambio no pare", confió, e insistió en la necesidad de "avanzar" en la consecución de "progreso y derechos".
PARTICIPACIÓN
Acompañado por el cabeza de cartel del PSdeG por Ourense, Manuel Vázquez, y por los número dos, Laura Seara, y tres, Pablo López Vidal, Touriño recibió el apoyo de numerosos vecinos que dieron por "lograda" su victoria en las elecciones autonómicas del 1 de marzo y a los que animó "a participar" para "ganar".
Por último, reafirmó la "voluntad del Partido Socialista" de trabajar en "colaboración" con los ayuntamientos y con el Gobierno central, debido a su apuesta por "una Galicia de libertad", tras lo cual criticó los "estragos urbanísticos" de Francisco Camps en Valencia, los "espías" de Esperanza Aguirre en Madrid y los "consejeros corruptos" de Jaume Matas en Baleares.
