Culpa al PP de "buscar réditos electorales" en esta materia y asegura que la Xunta toma sus decisiones "independientemente" de los comicios
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, garantizó hoy "firmeza" para "terminar con el todo vale" en la ordenación y protección del territorio y aseguró que la administración velará "por la primacía" del interés general frente al particular, "legítimo a veces, pero no es otras ocasiones".
En un desayuno informativo en su residencia oficial, acompañado de la conselleira de Política Territorial, María José Caride, Touriño proclamó que el Gobierno gallego "no doblará el espinazo por mucha presión de parte que se meta" y seguirá "firme" en la defensa de la legalidad urbanística.
En este sentido, prometió "rematar con la política de hechos consumados", pues considera que "no conduce a ningún lado", pues "legalizar la aberración no es propio de un país avanzado y de unos ciudadanos maduros". "Por ese camino se empobrece el territorio", recordó.
Pérez Touriño reiteró que el PP dejó "una herencia de un país desordenado" y avanzó que "en el segundo semestre de este año" el bipartido tendrán listas las directrices de ordenación del territorio y el plan del litoral. "Ahora sí, en 16 años no", insistió.
El presidente de la Xunta también hizo referencia a la necesidad "de garantizar la seguridad jurídica" de los ciudadanos, las ciudades y los empresarios, para que se sepa "qué se puede hacer y no puedan ser engañados". "No estamos reformando el marco legal, lo estamos desarrollando", precisó.
ACABAR CON LOS GONDOMARES OCULTOS
"El urbanismo tiene que ser transparente. Si queremos acabar con los Gondomares ocultos -municipios pontevedrés donde se registró un supuesto caso de corrupción urbanística-, hay que actuar y colocarse del lado de la ley y del Gobierno, que defiende el interés general. El país está caminando en la dirección correcta, creo que es un camino de éxito", resumió.
Emilio Pérez Touriño responsabilizó al PP de "buscar réditos electorales" en este ámbito y aseguró que la Xunta toma sus decisiones "independientemente" del calendario de los comicios, pues recordó que de cada cuatro años en tres hay citas con las urnas. "El Ejecutivo está para gobernar y no para cálculos electorales", añadió.
En este sentido, insistió en que son los populares los que "se colocan fuera" para lograr "réditos" y denunció que fue la alcaldesa de Vigo, Corina Porro, la que "introdujo en el debate electoral" el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM), pues la Xunta expresó el compromiso de que esta ciudad "tiene que tener un buen plan este año".
En sus críticas al Gobierno local de Vigo también se preguntó "¿por qué se resisten a cumplir lo que el anterior Gobierno le puso por escrito? y ¿cómo se puede ser tan duro de oído y llevar a la ciudad a la inseguridad jurídica?", pues recordó que las alegaciones presentadas por la actual Xunta al PGOM son similares a las expresadas por el anterior Gobierno autonómico popular.
Pérez Touriño se refirió igualmente a la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) que ilegaliza el plan especial de la Finca do Conde, en la ciudad olívica, y volvió a preguntarse quién asume las responsabilidades que se deriven de este fallo.
REPERCUSION POSITIVA
Por su parte, la conselleira de Política Territorial, María José Caride, defendió la ley de medidas urgentes que paraliza las nuevas construcciones a menos de 500 metros del litoral y afirmó que no repercutirá de manera negativa en la economía gallega.
Por el contrario, considera que será "una medida positiva que hará de la costa un lugar más atractivo" y se refirió a otras comunidades, como Asturias, donde se aplicó una norma similar con anterioridad, y fue buena para el desarrollo y crecimiento de la economía de esa autonomía.
Sobre las críticas recibidas por esta decisión, Caride aseguró que era necesario "tomar medidas ya", pues "el sector público no puede mirar para otro lado y que sea sólo el privado el que regule" el mercado urbanístico.
