Trasladan a la cárcel de Teixeiro a uno de los presuntos autores del crimen de un hombre en Rubí (Barcelona)

Actualizado: miércoles, 19 julio 2006 16:43

BARCELONA, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Policía trasladó a la cárcel de Teixeiro a uno de los presuntos autores del crimen de un hombre en Rubí (Barcelona) cuyo cadáver fue hallado el pasado viernes en su vivienda atado de pies y manos.

Según informó hoy el Cuerpo Nacional de la Policía, la inspección ocular realizada en el piso en el que se encontró a la víctima permitió identificar por huellas a Eduard I.C., rumano de 22 años, que ya fue detenido el pasado 6 de julio en Portbou al constarle una reclamación de la Comisaría de Santiago de Compostela por un robo con fuerza.

El presunto autor declaró ante el juez en Figueres, que ordenó su ingreso en prisión, por lo que fue trasladado a Teixeiro. Además de las huellas localizadas en el piso, un amigo de la víctima confirmó a la Policía que la tarde del cinco de julio estuvieron en un bar de la calle Muntaner de Barcelona, donde conocieron a dos chicos extranjeros, probablemente del Este de Europa.

La víctima regresó de noche al piso de la víctima en Rubí, después de que los dos extranjeros mostrarán su interés por alquilarle una habitación. El amigo de la víctima reconoció al presunto autor en las fotografías de la policía como una de las personas con las que se marchó el fallecido.

Eduard I.C. tiene antencedentes por infracción a la Ley de Extranjería y por robo con fuerza. La Policía ha trasladado la información al juzgado de Rubí que investiga el caso.

La víctima, P.G.F., de 54 años, fue hallado el pasado viernes en su domicilio, en avanzado estado de descomposición y tendido sobre la cama, atado por el cuello, la boca, los pies y las manos.

Según ha revelado la autopsia, el hombre murió asfixiado fruto de las fuertes ataduras del cuello. También presentaba traumatismos en la cara, lo que pudo provocar hemorragias por vía nasal y bucal, y se calcula que habría muerto hacía una semana.

La Policía acudió a la vivienda después de que varios amigos del fallecido no tuvieran noticias de él desde principios de mes. Los agentes hallaron en el piso numerosos objetos revueltos, aunque según los investigadores no se echaron en falta efectos de valor que hicieran pensar en un móvil económico, y el ordenador estaba encendido con varios programas abiertos.

La Policía Científica encontró 22 huellas digitales en varios objetos de la casa y recogieron para su análisis un cuchillo, dos latas de bebida vacías, una botella de vino vacía y dos pantalones, así como tarjetas, agendas y películas de videocámara.