VIGO, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
El vecino de Teis, en Vigo, que ha iniciado el jueves una huelga de hambre para pedir que no se derribe parte de su casa, Eduardo Fernández, aceptará la oferta de realojo hecha por el Ayuntamiento "solo si no queda otro remedio", según ha explicado a Europa Press.
Según Fernández, su intención es mantenerse en huelga de hambre a las puertas del consistorio para reclamar un "indulto" por parte del juez que ha ordenado el derribo de la parte superior de su vivienda --a instancias de la denuncia interpuesta por una familiar--, construida por él mismo sin licencia de obra.
Este vecino de Teis, que ha reconocido que la ampliación que hizo es "ilegal" --por lo que ha pedido "perdón"-- ha señalado que pretende seguir viviendo en su casa, en la calle Gondosende, ya que fue la casa de su abuela. También ha recordado que ese es el barrio donde está integrado con su mujer --que, al igual que él, padece una minusvalía--, y sus hijos de 6 y 11 años de edad.
Eduardo y su familia tienen de plazo hasta el próximo 29 de abril a las 9.00 horas para realizar la demolición y, en caso de no acometerla, será ejecutada por la Gerencia Municipal de Urbanismo. Fernández ya ha advertido de que, con su pensión, no puede afrontar los 10.900 euros que cuesta ese derribo y que el Ayuntamiento le reclamaría.
El gobierno municipal de Vigo ha mostrado su "solidaridad" con esta familia, aunque ha puntualizado que el derribo de la vivienda depende de los juzgados y, por tanto, solo el juez puede frenarlo. En todo caso, ha iniciado un expediente de realojo para esta familia "de acuerdo con su grado de discapacidad y su situación económica".
