Dos hermanos malpicanos quedaron a la deriva durante ocho horas en la zona de Punta Razo, en Carballo, en agosto de 2015 hasta ser rescatados
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciaim), dependiente del Ministerio de Fomento, ha emitido un informe sobre el vuelco y hundimiento del pesquero Casal Verdes --ocurrido en agosto de 2015 en las proximidades de la Punta de Razo (Carballo)-- en el que concluye que la causa del accidente fue "un golpe de mar del que la embarcación no pudo recuperarse".
A esto se une como motivos "subyacentes" del accidente que hubo "una incorrecta planificación de la travesía por parte del patrón, que no evitó una zona de rompientes en su trayecto de regreso a puerto".
En este siniestro marítimo, los dos tripulantes de la embarcación quedaron a la deriva durante ocho horas en el agua agarrados a sendos aros salvavidas hasta que una persona los escuchó y dio la alerta.
Patrón y marinero, hermanos malpicanos, fueron sacados del agua por una lancha neumática del servicio de playas de Razo que los localizó con síntomas de hipotermia.
En el informe publicado, en el apartado de lecciones de seguridad, se señala que, ante lo ocurrido, los patrones de embarcaciones de pesca local "deberían ser conscientes de los riesgos de navegar en zonas de poca profundida, donde se produce un encrespamiento del mar de fondo y rompientes".
Además, se remarca que la embarcación no llevaba radiobaliza satelital y tampoco zafa hidrostática que permitiría el despliegue de la lancha salvavidas, elementos estos que no son obligatorios, pero a la vista de las circunstancias se recomienda su instalación.
HECHOS
La embarcación de artes menores, con puerto de registro en Vigo, salió del puerto de Malpica antes de las 4,00 horas del 18 de agosto de 2015 con aparejos para la pesca del arte de beta.
Pasadas las 10,00 horas, en la zona de Punta Razo, el patrón puso rumbo al puerto de Malpica mientras el marinero se quedó en cubierta sacando el pescado de las redes. Durante ese viaje, la embarcación "sufrió un golpe de mar por la banda de estribor que la hizo zozobrar".
Así, el marinero que trabajaba en cubierta "fue lanzado al mar mientras que el patrón que se encontraba en el interior del puente fue arrastrado por la embarcación que se hundía".
Con la embarcación semisumergida, el patrón "fue capaz de abrir la puerta de acceso al puente situada a popa, salir de este y bucear hasta poder salir de debajo de la embarcación".
Dado que las balsas salvavidas se hundieron con la embarcación, tan solo quedaron a flote unos aros salvavidas a los que se agarraron los tripulantes durante horas. De hecho, la Ciaim determina que si esta accidente "no hubiera ocurrido en verano, con total seguridad, los marineros no habrían podido ser rescatados con vida".
