SANTIAGO DE COMPOSTELA, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
El temporal de viento con ráfagas de hasta 100 kilómetros por hora provocó que durante esta madrugada se soltaran varios barcos en Burela (Lugo) y Noia (A Coruña) e incluso bateas en Vigo (Pontevedra). De todas formas, todos ellos fueron recuperados y atados sin problemas. La misma decisión tomó la flota de bajura gallega con sus embarcaciones, que permanecen amarradas en los puertos. En algunas de estas instalaciones también se registraron algunos destrozos y lanchas inundadas.
"Hoy no hay ningún valiente", admitieron con sentido del humor miembros de la lonja de Baiona, donde apuntaron a un mar "excesivamente picado" y vientos de doce nudos (22 kilómetros por hora) para sustentar lo correcto de esta decisión, que también tomaron el resto de los compañeros de la flota de bajura pontevedresa.
Así, en la cofradía de O Grove argumentaron que el mar estaba "muy batido" y con "mucho oleaje" para que en hoy las embarcaciones saliesen a faenar, tal y como corroboró la flota de Bueu.
El viento no sólo ha supuesto el amarre de las embarcaciones, sino algún incidente en puertos, con destrozos y lanchas inundadas en Cambados y Sanxenxo. Precisamente, en este municipio un barco de bandera inglesa se cayó del varadero al agua y el muelle registró varias rupturas de amarres, lo que provocó que varias barcos se llenasen de agua.
SITUACION SIMILAR EN A CORUÑA Y LUGO.
En el litoral norte, la situación es similar. Así, la flota de bajura de A Coruña y Lugo permanecen en puerto. "Al viento le llega bien", resumió lacónicamente un miembro de la Cofradía de Ribeira para explicar la decisión del sector de no salir hoy a faenar.
En Cariño, en un primer momento "entre cuatro y cinco embarcaciones" salieron a faenar. No obstante, tuvieron que "dar vuelta y ahora todos están en puerto", apuntó un miembro de la cofradía. Sin embargo, en Cedeira ningún barco se atrevió a dejar el puerto y no hubo ningún amago de intento de actividad.
No ocurrió lo mismo en litoral lucense. Así, flotas de bajura tomaron esta decisión a primeras horas de la mañana. Sin embargo, el mal estado del mar y la intensidad del viento les obligó a "retornar inmediatamente", reconocieron armadores. No obstante, en estos momentos, los arrastreros continúan con su actividad.
