PALMA DE MALLORCA, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -

Aproximadamente dos terceras partes de los hoteles de Baleares realizaron mejorías en sus equipos informáticos, o los sustituyeron por otros más modernos, a lo largo de 2007, según datos ofrecidos por el Govern, que establecen que un 66,1 por ciento de los establecimientos realizó este tipo de innovación durante el pasado ejercicio.

Así consta en el estudio 'Innovación y turismo: el sector hotelero en las Illes Balears en el año 2007', realizado por la investigadora Francina Orfila-Sintes, miembro del Departamento de Economía de la Empresa de la Universidad de las Illes Balears (UIB), y que el Ejecutivo autonómico incluyó en el último informe de coyuntura económica del archipiélago.

Cabe señalar que las mejorías informáticas supusieron el capítulo más destacado de entre todos aquellos en que los establecimientos alojativos realizaron innovación, seguido por las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) externos, por las que apostaron un 64,9% de las compañías; mientras que las externas fueron incorporadas por un 32,5% de las empresas del sector.

Según el volumen de hoteles que incorporaron mejorías el año pasado, se sitúan aspectos como la restauración (62,8%), las cocinas (61,7%), las habitaciones (60,8%), la seguridad (44,3%), el mantenimiento (39,5%), la limpieza (37,2%), la gestión de la calidad (24,5%) , la estructura organizativa (20,4%) y, finalmente, la gestión medioambiental (17,1%).

Por categorías, los establecimientos de entre cuatro y cinco estrellas fueron los que más innovaciones incorporaron, con un 6,9 por ciento del total de la planta implicado en esas inversiones, volumen que se situó ligeramente por debajo (6,8%) en el caso de los de tres estrellas, y que se redujo casi a la mitad (3,7%) en los que tienen menos. Aunque, cabe precisar que fueron las proporciones del hotel el aspecto determinante para que se realizaran mejorías.

El estudio aclara que la mejora de la calidad fue el principal objetivo que motivó la innovación, según citaron un 88,1 por ciento de los profesionales consultados, mientras que sólo un 10,2% lo hizo para reducir las compras de entrada. Además, un 65,7% de ellos consideró que el desarrollo tiene un coste elevado.