Tacha la actuación del ex presidente como "impresentable" y "fuera de lo común"
PALMA DE MALLORCA, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
La máxima responsable del Consell de Mallorca, Francina Armengol, aseguró hoy sentir "sentimientos contradictorios" de "rabia absoluta" y "vergüenza" tras haber visto la entrevista al ex presidente autonómico, Jaume Matas, y, por otra parte, aseguró que ella, de la misma manera que dijo ayer el líder del Ejecutivo, Francesc Antich, "no podría" haber abonado una fianza de tres millones de euros.
En una entrevista concedida a 'Els matins' de TV3 y recogida por Europa Press, Armengol consideró que la actuación de Matas es "impresentable", se encuentra "fuera de lo común" y "dice mucho de cómo funcionaba su Govern".
Asimismo, y pese a que reconoció que el hecho de que una persona miembro de un partido sea corrupta no significa que el resto de su formación también lo sea, reprochó al PP no haber estado "a la altura de las circunstancias" ya que "si alguien ha desviado dinero público, debe ser castigado de manera contundente".
La socialista indicó que resulta "difícil de entender" que Matas y su familia cuente con el patrimonio que "presuntamente tiene", así como que después pague la fianza de tres millones de euros.
"El señor Matas hacía ostentación pública", por ejemplo, afirmó, con su vivienda -el palacete- de la calle de Sant Feliu o las compras de su mujer con billetes de 500 euros, todo ello, según opinó, era "un run-run conocido en Palma".
Armengol remarcó que lo importante es conocer si el ex ministro de Medio Ambiente gestionó bien el dinero público y si desvió fondos para su enriquecimiento personal. En el caso de que eso sea cierto "a mi no me da pena", señaló.
La presidenta de la institución mallorquina reconoció que Baleares pasa por una época "muy compleja y difícil" aunque aseguró estar "contenta" por el hecho de que el Estado de Derecho funcione y que cuando hay "movimientos fuera de los límites éticos y legales" éstos se investiguen.
No obstante, consideró que lo que pasa en Mallorca no es diferente de lo que ya se ha desarrollado o acontece en otras Comunidades Autónomas ya que no se trata de una tierra donde "todo se hace fuera de la legalidad". "Hemos tenido unos gobernantes que han estirado más el brazo que la manga y que han sido poco rigurosos a la hora de gestionar el dinero público".
Sin embargo, hizo hincapié en que las Baleares no son "unas islas de corruptos". También apuntó que el PSOE defendió una "línea de oposición clara" en la que pidieron explicaciones sobre esa forma de gobernar "tan exagerada".
En cuanto a la expulsión de UM del Govern, Consell y Ayuntamiento de Palma, comentó que todavía tienen pactos de gobierno con el partido regionalista en algunos ayuntamientos que "funcionan bien" y que, durante otras épocas de pactos, "no ha habido ningún caso de corrupción que se esté investigando".
También destacó que la nueva dirección de Josep Melià tiene como propósito renovar toda la formación y eso se trata de un "punto positivo" que se debe valorar.
Preguntada sobre si pondría la mano en el fuego por el Consell de Mallorca, aseveró que tiene la "tranquilidad de conciencia" de que no están "metidos en ningún caso de enriquecimiento de nadie", concluyó.
En relación a las próximas elecciones, pidió a los ciudadanos de las islas que "voten en consecuencia" a la actuación de los partidos frente a los casos de corrupción.
