Calvo espera tener en dos semanas el informe jurídico que avale o no el derribo del monumento franquista de Sa Faixina

PALMA DE MALLORCA 22 Ene. (EUROPA PRESS) -

La alcaldesa de Palma, Aina Calvo, esperó hoy tener en dos semanas el informe jurídico definitivo encargado a la UIB, que avale o no el derribo del monumento franquista dedicado al Crucero de guerra 'Baleares' y que está ubicado en Sa Faixina, de forma que revelará si cumple o incumple la Ley de Memoria Histórica, aprobada en el Congreso de los Diputados, que establece que se deben eliminar todos los símbolos franquistas de los espacios públicos.

En una rueda de prensa, Calvo anunció que tan pronto como sea definitivo, comparecerá con los resultados del citado informe para explicar la decisión que adopta el Ayuntamiento y, en este sentido, subrayó la "importancia" que tiene contar con toda la información para adoptar una postura lo "más fundamentada posible".

Preguntada sobre la información publicada por un medio de comunicación, que revela que un informe avala el derribo del monumento de Sa Faixina al confirmar su nulo valor histórico y patrimonial, la alcaldesa apuntó que este es uno de los muchos informes que se han solicitado para elaborar el informe jurídico general sobre el cual se tomará la decisión definitiva.

"No queremos un informe para escudar ninguna decisión, sino que necesitamos tener rigurosidad jurídica y queremos estar seguros de que nos ajustamos al cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica con un ámbito normativo amplio", recalcó. De esta forma, insistió en que gracias al informe general, "sabremos si el monumento se ajusta o no a la citada Ley y cuáles son las fórmulas jurídicas de aplicación".

Concretamente, el artículo 15 de la Ley de Memoria Histórica, que hace referencia a los símbolos y monumentos públicos, establece que "las administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura".

Asimismo, en el artículo 15.2 contempla que "lo previsto en el apartado anterior no será de aplicación cuando las menciones sean de estricto recuerdo privado, sin exaltación de los enfrentados, o cuando concurran razones artísticas, arquitectónicas o artístico-religiosas protegidas por la ley".

"NORMALIZAR LA PLAZA DE SA FAIXINA"

La Asociación de Memoria Histórica de Mallorca ha llevado a cabo en los últimos meses concentraciones frente al monumento franquista de Sa Faixina y, en esta línea, la presidenta de esta entidad, Maria Antònia Oliver, exige al Ayuntamiento que cumpla la normativa para que se "normalice" esta plaza como un espacio público en el que todo el mundo pasee "tranquilamente sin que nadie se sienta ofendido, no sólo las víctimas del franquismo, sino cualquier ciudadano demócrata".

"La ideología franquista sigue presente en este monumento y, por ello, debe ser demolido, teniendo en cuenta que la permanencia de la simbología franquista en nuestras calles es un agravio incompatible con las ideas democráticas y el respeto que se merecen las víctimas del franquismo y sus familiares", recalca.

La Asociación 'Memoria de Mallorca' recuerda que el crucero 'Baleares' fue una "máquina de guerra utilizada por los militares golpistas para causar la muerte de centenares de civiles inocentes y la destrucción de diversas ciudades, como Castellón, Málaga y Tarragona, que se mantuvieron fieles al régimen legal y democráticamente constituido de la II República Española".

Por tanto, para la presidenta de esta asociación, la retirada del monumento, que fue inaugurado por Franco y en el que se lee 'Mallorca a los héroes del Crucero Baleares. Gloria a la Marina Nacional y Viva España', sería una muestra de "normalización democrática", teniendo en cuenta que no sólo es uno de los más conocidos en las islas, sino en todo el Estado.