PALMA DE MALLORCA 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Palma ha condenado a diez meses de prisión y al pago de 360 euros de multa a un hombre que intentó sustraer 23 cartones de tabaco de un estanco, valorados en un total de 808,5 euros, y que robó nueve botellas de whisky de un supermercado tasadas en 149,5 euros, establecimiento del que días después intentó salir con otra botella de esta bebida alcohólica que no había pagado.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, sobre el inculpado, que pasó tres días en prisión preventiva por estos hechos, pesan un delito de robo con violencia en grado de tentativa con la agravante de reincidencia, una falta de lesiones y dos de hurto -una consumada y la otra en grado de tentativa-.
El tribunal de la Sección Segunda confirma de este modo la resolución que fue dictada en primera instancia y que considera probado cómo Kosta E.K. se dirigió, sobre las 11.00 horas del 25 de agosto de 2011, a un estanco de Santa Ponça donde, movido por la intención de obtener un beneficio ilícito, introdujo 23 cartones de tabaco en una bolsa que portaba.
En ese instante fue sorprendido por el propietario, quien recriminó la actitud del acusado, que comenzó a tirar los cartones por el suelo intentando marcharse con cuatro de ellos. No obstante, el estanquero impidió que se los llevara tras mantener un forcejeo con el acusado, quien huyó tras darle una patada en la pierna derecha, lo que provocó diversas lesiones en el afectado.
Lejos de cesar en su comportamiento, el inculpado se presentó en un supermercado cercano, del que intentó salir con botellas de whisky tasadas en 345 euros, si bien fue interceptado por empleados del establecimiento, quienes al retenerlo comprobaron que se trataba de la misma persona que días antes había conseguido sustraer nueve botellas de la misma bebida.
La defensa del acusado alegó, en su recurso de apelación, haber visto vulnerado el derecho a la presunción de inocencia de Kosta E.K., al considerar contradictorias tanto su versión como la del regente del estanco, quien, aseguró, mantiene una enemistad manifiesta con él. Sin embargo, el tribunal considera que basa su resolución en prueba de cargo suficiente para condenarle.