PALMA, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un estudio del Observatorio Social de Baleares de la Universitat de les Illes Balears (OSIB-UIB) concluye que el éxito de la innovación social radica en su capacidad transformadora para mejorar las condiciones de vida de las personas y colectivos vulnerables.
Así se expone en el libro que ha editado el Observatorio bajo el título 'Buenas prácticas hacia la innovación transformadora para la inclusión social en Baleares', en el que recoge iniciativas de inclusión social innovadoras desarrolladas por las entidades del Tercer Sector.
El estudio es obra de David Abril, Maria A. Carbonero, Isabel Nadal (coords.), Fernanda Caro, Clara Ferragut, Alfonso López, Miquel . Oliver, Ana Santángelo y Caterina Thoms.
Se trata de un estudio de casos de iniciativas de inclusión social, que abarca campos como la inserción sociolaboral, la vivienda, la salud mental, la diversidad funcional, las violencias de género o las iniciativas comunitarias en los barrios y en la ciudad.
Las iniciativas, que son de distinta naturaleza, han sido analizadas en base a una matriz de indicadores de innovación transformadora para la inclusión social (ITIS), elaborada por el OSIB y que contempla aspectos como la definición de la necesidad o la demanda concreta, los niveles de participación de las personas usuarias, la vinculación al territorio, la perspectiva de género, la resiliencia de las entidades, o la relación con los poderes públicos, entre otros.
Según las investigadoras, "el buen trabajo que realizan las entidades del Tercer Sector, que ha ido evolucionando a lo largo de los años, ha logrado institucionalizar la atención a colectivos vulnerables, y que las administraciones finalmente hayan reconocido la importancia de estos servicios que prestan las entidades en campos como la diversidad funcional o la inserción sociolaboral".
De hecho, subrayan que "aquellas iniciativas con mayor éxito e impacto son a menudo las que hacen las entidades no por su cuenta, sino cooperando unas con otras, por ejemplo, en el campo de la salud mental".
El estudio recuerda que la innovación en el ámbito de la inclusión social no se puede reducir a "aplicar criterios de la empresa convencional en el ámbito social, sino a buscar fórmulas que sobre todo mejoren las condiciones de vida de las personas colectivos vulnerables, algo que muchas entidades han resuelto a través de la creación de iniciativas de economía social, como las empresas de inserción".
Las coordinadoras del informe señalan que "todas las entidades realizan un trabajo excelente, orientado al bienestar de las personas que atienden y a las que dan protagonismo". Este estudio precisamente pretende identificar y analizar estas buenas prácticas, ponerlas en común y aprender de ellas, tanto por parte de otras entidades como de las administraciones.
Nadal y Abril han reivindicado una UIB que sea útil en la sistematización del conocimiento que generan las prácticas sociales desplegadas por las entidades, como parte de la función social de la propia universidad.
El estudio concluye con una 'Guía de prácticas de innovación transformadora para la inclusión social (ITIS)', que da claves sobre cómo mejorar la intervención social a partir de una serie de objetivos y condiciones, acompañados de indicadores concretos para su cumplimiento.
La elaboración y publicación de este estudio ha sido posible gracias a una subvención para publicaciones en materia de Servicios Sociales de la Dirección General de Planificación, equipamientos y formación de la Conselleria de Asuntos Sociales y Deportes del Govern.
