La nueva administración tendrá que presentar su Memoria Anual ante el Parlamento autonómico
PALMA DE MALLORCA, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía Superior de les Illes Balears, que se constituyó hoy después de que ayer lo hicieran el resto de las 16 comunidades autónomas españolas tras la entrada en vigor del nuevo Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal, será una administración que nace con el firme compromiso de ser "imparcial" y defender "el interés social" para estar acorde con una sociedad "cambiante, exigente y agradecida".
Así lo manifestó en su discurso el ya fiscal superior de las Illes Balears, Bartomeu Barceló, quien anteriormente era fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears (TSJIB), que reconoció su "ilusión" y la del Ministerio Fiscal ante el cambio que se produce a partir de hoy.
Según subrayó Barceló, la figura de la nueva Fiscalía implica la aparición del fiscal superior como interlocutor "idóneo" de las Autoridades e Instituciones de la Comunidad Autónoma, que permitirá que las autoridades autonómicas puedan instar del fiscal las actuaciones que estimen precisas para el interés general.
Barceló apuntó que que otro de los nuevos aspectos relevantes es la presentación de la Memoria Anual de la Fiscalía ante el Parlament, una hecho que según afirmó, cubre dos necesidades, como son conectar al fiscal "con quien es el representante específico de los ciudadanos" y realizarlo con la asamblea "elegida por la sociedad".
Sobre la repercusión de esta nueva figura en Baleares, Barceló recordó que en las comunidades uniprovinciales --excepto Madrid-- la reforma no lleva aparejada el desdoblamiento entre las Fiscalía de la Comunidad Autónoma y la Fiscalía Provincial, un desdoblamiento que según aseguró, se producirá a medio plazo cuando las reformas procesales "sean una realidad". En este sentido, manifestó que su deseo es que a medio plazo se hagan también realidad las Fiscalías de Área en jurisdicciones como las de Eivissa y Menorca.
Asimismo, el fiscal superior llamó la atención sobre la necesidad de poner a la Fiscalía a un nivel acorde "a las exigencias de esta sociedad", una sociedad que según dijo, "es mucho más sabia de lo que a veces se cree". "Se reitera a esa sociedad el compromiso de una Fiscalía cuyo único interés es exclusivamente la defensa del interés social", sostuvo.
En esta línea, resaltó que los principios motores de la nueva administración son la "legalidad e imparcialidad", un principio este último, que según destacó, "ha sido tan denostado por algunos y poco creído por otros", aunque según recalcó, es un principio "innato" al Ministerio Fiscal.
"Es el compromiso de una Fiscalía que quiere ser lo más transparente posible, abierta a la sociedad y a sus críticas pero también, plenamente firme en la convicción de que sólo guiará la actuación la aplicación objetiva de la Ley" subrayó.
En declaraciones posteriores a los medios de comunicación, el fiscal superior explicó que en Balears la diferencian no se notará tanto como en otras regiones españolas y apuntó que el cambio "no será en el trabajo del día a día".
Así, recalcó que la plantilla se ha visto incrementada tan sólo en un fiscal, aunque señaló que si se produce un nuevo aumento en el futuro, esté tendrá en cuanta las áreas de la Fiscalía que soportan una mayor carga de trabajo.
El acto fue presidido por el fiscal del Tribunal Supremo, José María Paz, y a él asistieron el presidente del Tribunal Superior en Baleares, Ramón Socias, la presidenta del Parlament, Maria Antònia Munar, el comandante general de Baleares, José Emilio Roldán, así como numerosos magistrados, fiscales y miembros de la judicatura.
