PALMA DE MALLORCA, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Territorio, Energía y Movilidad, Marc Pons, ha declarado este miércoles que el peaje de las autopistas de Ibiza representa "una bomba de relojería" que ha supuesto 426 millones de sobrecoste a los ciudadanos.
Preguntado sobre esta materia durante el pleno del Parlament, Pons ha reiterado que este peaje es "una bomba de relojería diseñada por gente que sabía lo que hacía y que, de forma perversa, consiguió que pagasen mucho más del coste real de las obras". Así, ha explicado que, cuando acabe la concesión, los ciudadanos habrán abonado 598 millones de euros, "por unas obras que costaron 172 millones".
Por ello, ha censurado esta "fórmula perversa. Además, ha explicado que hay dos autopistas, de manera que en la de acceso al aeropuerto hay cinco puntos de recuento "que se miden bien", si bien en la otra hay un único punto "y esto distorsiona".
Según ha detallado, el Govern encargó un estudio y se establecieron ocho puntos gracias a los cuales se detectó que había un 19 por ciento de tráfico menos. Esto, ha añadido, supone un "replanteamiento obligatorio" que se debe tener en cuenta pero que, al estar ligado al pliego de condiciones, debe haber un acuerdo con la concesionaria o, en caso contrario, iniciar litigios judiciales.
Ante esta situación, el diputado de Podemos Aitor Morràs ha pedido al Govern que "actúe cuanto antes" para minimizar lo que, ha opinado, es "un atraco en diferido" por "culpa de la gestión de Mabel Cabrer y Jaume Matas".
