PALMA, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un hombre ha negado este lunes, en la Audiencia Provincial de Baleares, haber abusado de una amiga de su hija, menor de edad, aprovechando una noche en la que se quedó a dormir en su casa por su cumpleaños.
La Fiscalía pide ocho años de cárcel para el acusado, que ya cumplió una condena anterior por una agresión sexual. El juicio se ha celebrado por la mañana en la Sección Primera de la Audiencia.
Los hechos denunciados se remontan a agosto de 2018, en un domicilio de un municipio de la Part Forana. Al parecer, la víctima se había quedado a dormir en la vivienda de su amiga porque el acusado la había invitado a un parque acuático al día siguiente con motivo de su cumpleaños.
La menor, que cumplía en la fecha diez años, aseguró que mientras dormía con su amiga en un sofá cama en el salón, se despertó y descubrió al hombre realizándole tocamientos y sexo oral. Según su relato, ella se fue al baño y al volver se colocó en otro lado de la cama donde no pudiera molestarla.
La niña explicó que intentó llamar a su madre sobre las 04.00 horas sin conseguir contactar con ella. Este testimonio se grabó durante la fase de instrucción y se ha reproducido como prueba preconstituida a puerta cerrada.
El hombre ha negado la versión de la menor. Entre otras consideraciones, ha afirmado que la noche de los hechos denunciados ni siquiera se enteró de que las niñas habían dormido en el sofá cama y no en la habitación de su hija, y ha declarado que nunca se ha quedado a solas con la denunciante.
Por su parte, la madre de la menor ha explicado cómo se enteró de los presuntos abusos aproximadamente mes y medio después. La mujer ha indicado que, al volver del parque acuático, su hija se le abrazó llorando pero ella no le dio importancia y lo achacó a que estaría cansada. Tiempo después se dio cuenta de que "algo iba mal" ya que la menor "estaba muy callada y ausente".
Cuando finalmente preguntó a la niña esta se lo contó: "Le costó mucho". La víctima expresó a su madre que la visita al parque acuático había sido "horrible" porque "había pasado todo esto, ella se sentía terriblemente mal y este señor [el acusado] parecía como si no hubiera pasado nada".
"A mí se me cayó el mundo encima", ha manifestado la mujer, que ha roto a llorar al hablar del estado psicológico de su hija a consecuencia de los abusos.
La madre denunció inmediatamente los hechos. Según la mujer, en el colegio al que acudían las niñas el resto de alumnos se enteraron porque la hija del acusado habló de ello diciendo que "era todo mentira", de modo que la relación entre las dos amigas se rompió.
La madre ha insistido en que, antes de este incidente, tenían mucha confianza con la familia del acusado porque las niñas eran muy amigas, y se había quedado a dormir en otras ocasiones con ellos.
Además de la pena de cárcel, la Fiscalía pide que el acusado indemnice con 10.000 euros a la víctima por los daños morales causados.
El hombre también tiene antecedentes por amenazas y revelación de secretos.
