PALMA DE MALLORCA, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -
El director general de IB3, Antoni Martorell, consideró hoy que sería un "ejercicio de irresponsabilidad" dimitir de su cargo, tras el registro policial que se hizo el pasado lunes en el marco de la Operación Voltor a la empresa Cent & Ment, que fue creada por él y vendida posteriormente a Jacinto Farrús. Así, defendió su continuidad en el ente público, ya que, a su juicio, está haciendo un "brillante" trabajo al frente del mismo, teniendo en cuenta que "se están cumpliendo los objetivos".
No obstante, recordó que él está "en manos del Parlament" que en cualquier momento, puede elegir a un nuevo director general de IB3, en caso de que considere que no es apto para ejercer este cargo, si bien dijo que mientras "no le digan lo contrario", continuará con el trabajo que le han encargado en la radio y televisión públicas de Baleares.
Martorell respondió así en la Comisión de Control sobre la Radiotelevisión de las Islas Baleares al parlamentario 'popular' Antoni Serra, quien estimó que el director general de IB3 tiene una posición "delicada", tras el registro judicial de la citada empresa, que lo "vincula" en algunos de los supuestos casos de corrupción que se están investigando en el archipiélago.
"Alfredo Conde tomó la decisión de dimitir como director de Producción Ajena de IB3, tras su imputación en el caso Maquillaje, de modo que se desvinculó para no mezclar las cosas y no perjudicar la gestión pública de la radio y televisión públicas de Baleares", subrayó Serra, quien consideró que "hay decisiones muy importantes que se deben hacer en este mismo sentido" en el ente público.
Sin embargo, Martorell recalcó que la situación procesal de Conde, quien se encuentra en libertad bajo fianza de 200.000 euros, al tiempo que abonó una fianza de responsabilidad civil de 800.000 euros, en el marco del caso Maquillaje, "no tiene nada que ver con la del director general de IB3".
Además, apuntó que mientras que Conde tenía un contrato de obra y servicio en IB3, el director general del ente es elegido por la Cámara autonómica, para lo cual, actualmente, se necesita una mayoría absoluta, mientras que la Ley del Ente de Radiotelevisión de Baleares que pretende aprobar el Govern contempla que la elección se haga por mayoría cualificada (dos tercios de la Cámara). Por tanto, Martorell dijo que continuará ostentando este cargo "mientras no se elija a otra persona".
Preguntado por la gestión de Alfredo Conde, el director general de IB3 la calificó de "muy correcta" y añadió que sus procesos judiciales "personales" en los que está inmerso "no tenían nada que ver" con su trabajo en el ente, donde se encargaba de adquirir la producción que ofrecía la FORTA para emitirla en la televisión pública de Baleares. "No se debe mezclar una cosa con la otra, de forma que no creo que se haya visto afectada ni nuestra gestión, ni la de las empresas que trabajan con nosotros", subrayó.
MARTORELL LAMENTA EL DESPIDO DE CONDE
Tras su decisión de dimitir el pasado 4 de marzo, Martorell recordó que llegó a un acuerdo con Conde para resolver su contrato laboral con IB3 y, en este sentido, lamentó "profundamente" el despido de esta persona, que fue el presunto testaferro del ex diputado de UM Bartomeu Vicens, así como ex-director de Ona Mallorca.
Por otro lado, manifestó que Conde se vio obligado a dimitir por las presiones mediáticas que se originaron contra él, tras quedar en libertad bajo fianza por un posible riesgo de fuga ante la gravedad de los hechos que se le imputan, así como por la cantidad que habría sido malversada desde el Consell de Mallorca a través de Studio Media, productora de su propiedad que recibió más de tres millones de euros públicos para la puesta en marcha de Ona Mallorca.
Se trata de una de las principales empresas investigadas ya que, junto con Vídeo U, habría recibido subvenciones millonarias en el pasado mandato desde la Institución insular.
.