Un modelo matemático para prevenir contagios de enfermedades en aeropuertos

Archivo - Carteles para establecer separación entre pasajeros en los asientos de la terminal B del aeropuerto de Palma, como medida de prevención ante el COVID-19.
Archivo - Carteles para establecer separación entre pasajeros en los asientos de la terminal B del aeropuerto de Palma, como medida de prevención ante el COVID-19. - EUROPA PRESS - Archivo
Publicado: jueves, 23 marzo 2023 18:10

PALMA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -

Un estudio liderado por el Instituto de Física Interdisciplinaria y Sistemas Complejos (IFISC, CSIC-UIB) ha planteado un modelo matemático que identifica las zonas con mayor riesgo de contagio en medios de transporte y recoge recomendaciones para evitar su expansión.

Los resultados se han publicado en la revista 'Nature Communications', según ha informado la Universitat de les Illes Balears (UIB) este jueves en una nota de prensa.

El investigador José Javier Ramasco ha reflexionado señalando que lugares como puertos o aeropuertos "se diseñan para optimizar la eficiencia logística, no para reducir la aglomeración", por lo que identificar las zonas más concurridas puede ser clave para atenuar el riesgo de propagación de nuevas enfermedades infecciosas.

Para ello se ha diseñado un modelo matemático capaz de detectar aquellos espacios, dentro del aeropuerto, con mayores probabilidades para la transmisión de enfermedades.

Los investigadores aplicaron el nuevo sistema para estudiar cómo se expanden virus como la gripe H1N1, el SARS-CoV-1 y el SARS-CoV-2, causante de la pandemia de COVID-19.

Mediante el análisis de los itinerarios de más de 200.000 individuos anónimos, recogidos en el aeropuerto londinense de Heathrow entre febrero y agosto de 2017, determinaron las zonas con mayor riesgo de contagio. Determinaron que son los bares y restaurantes porque conectan muchas personas en un mismo lugar y durante períodos largos de tiempo.

"La peligrosidad de las zonas para el contagio surge como un balance entre el número de personas que pasan por ahí y el tiempo que permanecen juntas. No siempre estos sitios son los más concurridos, sino que se necesita un tiempo en los contactos para transmitir la enfermedad", ha explicado Ramasco.

Una vez identificados los puntos calientes de contagio, es posible elaborar una política de inmunización espacial para evitar o reducir el riesgo de que el patógeno extienda más allá de los primeros casos no detectados. Esto se conseguiría a través del uso de rayos ultravioleta, desinfección de superficies o el filtrado del aire.

Además, los investigadores señalan que el método puede aplicarse para controlar cualquier otro patógeno no caracterizado (enfermedades emergentes) y que es generalizable a otros medios de transporte.

"Se puede utilizar en las estaciones de tren, de metro, de bus u otros lugares concurridos en las que no es posible mantener distancias interpersonales, como los centros comerciales o los centros de convenciones", ha incidido.

El proyecto es producto de una colaboración multidisciplinar internacional desarrollada dentro de las Plataformas Temáticas Interdisciplinares del CSIC Salud Global y Mobility 2030. Junto al IFISC han participado l'Institut National de la Santé et de la Recherche Médicale (Inserm); la Fondazione Bruno Kessler, en Italia, y la empresa Cuebiq Inc., que recoge las ubicaciones de los usuarios y las integra de forma anónima.