La Policía esclarece el homicidio de una mujer en Palma de Mallorca 30 años después

Actualizado: viernes, 27 enero 2006 10:03

El presunto autor fue su amante, que no fue detenido porque el delito ha prescrito penalmente

MADRID, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Policía ha esclarecido el homicidio de la granadina María Dolores Santiago Palenzuela en Palma de Mallorca 30 años después de su muerte, después de que en junio pasado se hallasen unos restos humanos en el sótano del hotel en el que trabajaba la víctima, informó hoy la Dirección General de la Policía.

Las pesquisas determinaron que el presunto autor del homicidio fue el amante de Palenzuela, un compañero suyo del hotel que estaba casado y que no ha sido detenido al tratarse de un delito penalmente prescrito.

Los hechos se remontan al 11 de enero de 1977, día en el que Palenzuela fue presuntamente asesinada después de comunicarle a su amante que pensaba abandonarle debido a que él no se decidía a dejar a su esposa.

Se cree que esa noche, los dos amantes se citaron en un último encuentro y el hombre la asesinó. Después del crimen, el presunto autor enterró y emparedó el cadáver de Palenzuela en un sótano situado bajo la lavandería del hotel Augusta en la que ambos trabajaban. A esa planta, diáfana y rodeada por jardines, sólo el compañero de Palenzuela y algún otro colaborador del presunto homicida en labores de jardinería y mantenimiento tenían acceso.

Tras el descubrimiento de los restos de Palenzuela, agentes del Grupo de Homicidios de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Baleares en colaboración con la Brigada Provincial de Policía Científica y las Comisarías Generales de Policía Judicial y Policía Científica reiniciaron las pesquisas.

Para ello, desenterraron por capas el esqueleto y lo reconstruyeron, fotografiaron la ropa y el reloj de la víctima y seguidamente la Comisaría General de Policía Científica realizó los estudios antropométricos, que determinaron que se trataba de una mujer blanca, de 1,50 metros de estatura y unos 50 años de edad y de análisis del ADN para identificar el cuerpo.

Las primeras investigaciones determinaron que los restos óseos encontrados pertenecían a una persona que había sido víctima de una muerte violenta, ya que el cadáver fue encontrado oculto en un lugar inaccesible, enterrado en una posición encogida, por lo que se descartó la muerte accidental o suicida. En los restos esqueléticos se observaron fracturas en costillas y cráneo, que pudieron ser producidas bien por golpes brutales o por algún tipo de arma.

El siguiente paso fue relacionar todos estos datos con la desaparición del hotel Augusta de una trabajadora llamada M ª Dolores, denunciada por un sobrino suyo. Comprobada la coincidencia de los rasgos antropométricos y edades aportados por la Comisaría General de Policía Científica con los de la denunciada se realizaron los trámites para localizar y contactar en distintos puntos de la Península y Menorca a familiares de la víctima.

Tras recibir la confirmación por parte de la Comisaría General de Policía Científica de que el cadáver pertenece a María Dolores Santiago Palenzuela, se remitió a la Autoridad Judicial y Ministerio Fiscal el atestado, instituciones que señalaron que por el tiempo transcurrido los hechos han prescrito penalmente.

La familia de la víctima ha manifestado su agradecimiento por el trabajo policial que ha permitido resolver el caso. Según informó la Policía en un comunicado, estos allegados consideran que este esfuerzo no ha sido en vano ya que Palenzuela "por fin podrá descansar en paz y recibir sepultura".