PALMA DE MALLORCA 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El parlamentario del PP Josep Juan Cardona acusó hoy al Govern de "discriminar" a las islas menores, tras suprimir en Menorca, Ibiza y Formentera las oficinas liquidadoras del Impuesto de Transmisiones y Sucesiones, pertenecientes a la Agencia Tributaria, "sustituyéndolas por unos simples buzones para que todo se tramite en Mallorca".
En el Pleno del Parlament, Cardona preguntó las razones por las que se han eliminado estas oficinas y, en esta línea, el conseller de Economía y Hacienda, Carles Manera, explicó que la bajada de los ingresos en la Comunidad obligan al Ejecutivo a acometer "políticas de ahorro en la gestión de la Agencia Tributaria, cuyo presupuesto disminuirá un 15 por ciento en 2010, lo que supondrá una reorientación de recursos".
"Este motivo no justifica la supresión de las oficinas liquidadoras en la Part Forana y en las islas menores, porque los ciudadanos se merecen un buen servicio y no un tratamiento discriminatorio", remarcó Cardona, quien criticó que la decisión del Govern supone eliminar un servicio que existía en Menorca, Ibiza y Formentera "desde hace más de 150 años".
Además, el parlamentario 'popular' destacó que en el 2008, las oficinas actuales que liquidan el impuesto de Transmisiones y Sucesiones han revisado, a través de los convenios que mantienen con los registradores, liquidaciones por un importe de 27 millones de euros, mientras que las oficinas de la Comunidad "sólo llegan a 18 millones".
Así, auguró que, a partir de ahora, la recaudación será inferior, teniendo en cuenta que la Agencia Tributaria de Baleares "no tiene la dotación de funcionarios ni de medios suficientes", lo que, a su juicio, "perjudicará un servicio que hasta ahora había funcionado bien y que no había recibido ninguna queja".
Por su parte, Manera recordó que la Agencia Tributaria es de Baleares y recalcó que tiene infraestructura en Menorca, Ibiza y Formentera, así como "buenos profesionales". En este sentido, señaló que la decisión del Govern "no cuestiona el trabajo profesional y técnica de las oficinas liquidadoras", si bien "somos conscientes de que tenemos personal disponible y la infraestructura adecuada para llevar a cabo un proyecto, que representa un ahorro de 4 millones de euros cada año a la Comunidad".
"Comenzamos con 6,4 millones de euros en 2007 y pasamos a 4 millones de euros en 2008-09, aunque debemos llegar a un ahorro mayor porque los ingresos han caído de manera drástica y hay una reducción presupuestaria a la que se debe ajustar la Agencia Tributaria, empleando recursos propios y usando herramientas telemáticas con la experiencia de sus técnicos, que son muy buenos y están por todas las islas", concluyó el conseller de Economía.