MADRID, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
La recaudación en concepto de impuesto de matriculación en Baleares se situó en 5,8 millones de euros en los cinco primeros meses del año, lo que supone una caída del 9% con respecto al mismo periodo del año pasado, según datos de la Agencia Tributaria que recoge Europa Press.
Con ello, el archipiélago presenta una caída sensiblemente inferior a la media nacional, dado que los ingresos del impuesto de matriculación en el conjunto del país se situó en 209,58 millones de euros en los cinco primeros meses del año, lo que supone una fuerte reducción del 28,6% respecto al mismo período de 2010.
El descenso en la recaudación por este gravamen, de competencia autonómica, es consecuencia directa de la caída de las ventas de coches y de la orientación de la demanda hacia coches más pequeños y eficientes, que tributan a tipos bajos o están exentos.
Durante el pasado mes de mayo, el impuesto de matriculación aportó a las arcas de las comunidades autónomas 43,5 millones de euros, cifra inferior en un 30,7% a la contabilizada en el mismo mes del ejercicio precedente.
MÁS LIMPIOS, PERO MÁS CAROS.
Prueba del desplazamiento de la demanda hacia coches más pequeños y eficientes es la reducción del importe medio del impuesto, que en mayo se situó en 706 euros, un 8,6% menos, y en los cinco primeros meses, en 715 euros (-1,5%). En el caso de Baleares, el importe medio del impuesto se situo en 535 euros.
Del mismo modo, las emisiones medias de CO2 bajaron un 3,5% en mayo, hasta 135 gramos por kilómetro, y se redujeron un 2,8% en los cinco primeros meses, con 136 gramos por cada kilómetro recorrido.
En cambio, como consecuencia de la supresión del Plan 2000E, los precios de los automóviles repuntaron en mayo un 1,7%, hasta 17.246 euros de media, y subieron un 5,1% en los cinco primeros meses, hasta 17.168 euros.
