USO advierte que la dirección de Emaya "no puede seguir mirando hacia otro lado y negando el acoso laboral"

Delegado De USO Colgado
Foto: USO
Actualizado: martes, 17 enero 2012 12:57

PALMA DE MALLORCA, 17 Ene. (EUROPA PRESS) - -

   El sindicato USO ha criticado este martes que la dirección de Emaya esté "mirando a otro lado y negando la posibilidad de que en la empresa municipal se produzcan sistemáticamente situaciones de acoso y de discriminación".

   Esta advertencia viene después de que haya transcurrido más de 24 horas desde que el delegado de Prevención de Riesgos Laborales de USO, Miguel Romero, decidiera colgarse de una columna del edificio central de Emaya, en la calle Joan Maragall de Palma, como señal de protesta "por los continuos casos de acoso laboral" que, según esta organización sindical, se están produciendo entre el personal contratado.

   A través de un comunicado, USO solicita a la dirección "que se siente con los representantes del Comité de Empresa y afronte la situación" que, según han aclarado, "nada tiene que ver con los salarios, que dicho sea de paso, si descontáramos los salarios de los directivos de la empresa al de los operarios, el promedio que cobran los trabajadores no es tan desorbitado, aunque en tiempos de crisis tengamos voceros que piensen que ser trabajadores de Emaya es un privilegio, cuando en realidad el privilegio es tener trabajo".

   Con todo, desde este sindicado han señalado que "la situación de acoso laboral no es nueva" y, en este sentido, han recortado que ya el pasado día 30 de diciembre de 2010, el Juzgado de lo social número 2 de Palma de Mallorca, condenaba a la empresa Emaya S.A. Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado de Palma "como responsable subsidiaria y a uno de sus directivos por un delito de vulneración de los derechos fundamentales de dignidad e integridad moral y les imponía abonar al denunciante en concepto de  indemnización 35.000 euros y otros 35.000 euros a Emaya".

   "En la actualidad, en la empresa municipal hay muchos casos similares, pero teniendo en cuenta la complejidad de la recopilación de pruebas y la dificultad, debido al miedo a perder el empleo, de conseguir testigos, no se pueden llevar a juicio, de ahí que Miguel Romero, apoyado por el Comité de Empresa, haya tomado una decisión tan drástica para llamar la atención sobre este grave problema", han apostillado.