BRUSELAS 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
El grupo 5+1 e Irán retomarán las negociaciones sobre el programa nuclear iraní el próximo 18 de septiembre en Nueva York, en los márgenes de la Asamblea General de la ONU, ha anunciado el portavoz de la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, que encabeza las negociaciones en nombre del grupo.
"Las discusiones con Irán encabezadas por la Alta Representante Ashton continuarán en Nueva York desde el 18 de septiembre", ha anunciado el portavoz de la jefa de la diplomacia europea, Michael Mann.
El portavoz ha explicado que habrá encuentros bilaterales entre altos funcionarios de los países europeos e Irán y también entre Estados Unidos e Irán a nivel de directores políticos y ha precisado que la reunión bilateral de los europeos con Irán tendrá lugar en Viena el 11 de septiembre.
Estos contactos tendrán lugar después de que la jefa de la diplomacia europea se reuniera el pasado 1 de septiembre en Bruselas con el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Javad Zarif, para abordar los próximos pasos.
El jefe de la diplomacia iraní se mostró "bastante optimista" tras su encuentro con Ashton de que ambas partes resolverán "a tiempo" un acuerdo, "dentro de los tres próximos meses".
ACUERDO PRELIMINAR
El pasado mes de noviembre el Grupo 5+1 e Irán lograron cerrar un acuerdo preliminar de seis meses de duración, que se podría prorrogar otros tantos, por virtud del cual Teherán se comprometió a congelar parte de su programa nuclear y retroceder en sus partes más polémicas a cambio del levantamiento de algunas sanciones.
El acuerdo definitivo contemplaría que Irán pueda mantener un programa de enriquecimiento de uranio dentro de unos términos pactados y limitados. A cambio, la República Islámica debe despejar todas las dudas sobre la naturaleza exclusivamente pacífica de su programa.
El Grupo 5+1 --que integran Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Rusia y China acordaron el pasado mes de julio con Irán darse cuatro meses más para tratar de llegar a un acuerdo definitivo sobre el programa nuclear iraní, tras admitir ambas partes que persistían "diferencias significativas".
Los escollos se han centrado hasta ahora en cuestiones como el número de centrifugadores que podría mantener la República Islámica, que incluso ha desarrollado nuevos modelos, y el levantamiento de las sanciones, según fuentes diplomáticas.