WASHINGTON, 8 May. (EP/AP) -
El comandante estadounidense de la tercera brigada de la décima División de Montaña --desplegada en el este de Afganistán--, el coronel John Nicholson, pidió hoy disculpas formales a las familias de las víctimas civiles afganas que murieron el pasado mes de marzo por fuego de marines norteamericanos, por las que dijo, sentir mucha vergüenza, al tiempo que explicó que el Ejército estadounidense desembolsará cerca de 2.000 dólares por cada muerte.
"Hoy nos reunimos con las familias de aquellas víctimas: 19 muertos y 50 heridos", explicó Nicholson, a las que aseguró se han trasladado las "disculpas oficiales por parte del Gobierno de Estados Unidos", además de anunciar el desembolso de alrededor de 2.000 dólares, equivalentes a 1.475 euros por cada familiar muerto.
En declaraciones al Departamento de Defensa norteamericano por videoconferencia emitidas desde Afganistán, el coronel Nicholson leyó un comunicado formal para disculparse a las familias de las víctimas. "Estoy delante de vosotros hoy, profundamente avergonzado y lamento muchísimo que americanos hayan matado y herido a personas inocentes afganas", incidió.
"La muerte y los heridos de inocentes afganos a manos de americanos es una mancha a nuestro honor y a la memoria de los muchos americanos que han muerto en la defensa de Afganistán y la población afgana", continuó.
Un convoy de marines norteamericanos que intentaba escapar --tras un ataque suicida con coche bomba perpetrado el pasado 4 de marzo-- abrió fuego indiscriminado contra vehículos y peatones en la zona, matando a 12 personas en el este del país.
Otro comandante militar norteamericano determinó que en aquella ocasión los marines hicieron un uso excesivo de la fuerza, por lo que remitió el caso a las autoridades que podrían proceder a una investigación criminal al respecto.
