Afganistán.- Un gobernador paquistaní asegura que el conflicto afgano se está convirtiendo en una "guerra de liberación"

Actualizado: sábado, 17 febrero 2007 10:05

PESHAWAR, 17 Feb. (EP/AP) -

El gobernador de la Provincia Fronteriza del Noroeste paquistaní, Ali Mohammed Jan Aurakzai, aseguró en rueda de prensa que el conflicto de Afganistán está tomando el cariz de una guerra de liberación contra tropas extranjeras.

Aurakzai aseguró además que las incursiones fronterizas denunciadas por Washington y Kabul representan sólo una porción de la insurgencia y pone así en entredicho la postura oficial estadounidense.

La principal razón de la vuelta de los talibán es la frustración de los pastunes, etnia mayoritaria a ambos lados de la frontera que, según Aurakzai, demanda que se escuche su voz en Kabul, tiene que sufrir las consecuencias de las operaciones militares y carece de la ayuda económica necesaria.

"Hemos llegado a una fase en la que gran parte de la población local ha comenzado a apoyar las operaciones de los milicianos y su desarrollo como una especie de movimiento nacionalista, un movimiento de resistencia, algo parecido a una guerra de liberación contra las fuerzas de la coalición", apuntó en rueda de prensa.

Aurakzai, quien fue general del Ejército paquistaní antes que gobernador, mostró su apoyo al acuerdo de septiembre con los líderes tribales de la región de Waziristán Norte y rechazó que éste propiciara un incremento de las incursiones fronterizas. Los milicianos con base en Pakistán provocan, como mucho, "un veinte por ciento de los problemas de Afganistán", aseguró.

El gobernador predijo además una guerra de años contra los milicianos y que ésta sólo podrá concluir con una negociación política que siente a talibán, Gobierno de Kabul y fuerzas de ocupación en una sola mesa. "Finalmente, todos los asuntos deberán ser resueltos mediante el diálogo en una mesa de negociación", concluyó.

La provincia que gobierna Aurakzai fue el refugio de un importante grupo de militantes talibán y de Al Qaeda que abandonaron Afganistán tras la invasión aliada que desplazó a los islamistas radicales del poder.