KABUL, 8 Jul. (EP/AP) -
Un total de 133 personas murieron el sábado en Afganistán, de las cuales 108 son civiles muertos por bombardeos sobre el oeste del país y 25 son afganos que murieron en ataques aéreos, incluidos los que perecieron mientras enterraban a sus familiares en un cementerio, según informaron aldeanos de las zonas atacadas.
Sin embargo, fuentes de Estados Unidos y de la OTAN negaron tener información que confirmase estos datos y un militar estadounidense advirtió de que los combatientes talibanes están ordenando a los aldeanos que digan que en los enfrentamientos han muerto civiles, independientemente de si es cierto o no.
Las afirmaciones y negaciones sobre la muerte de civiles forman parte de una campaña de guerra informativa en la que están envueltos los talibanes y los militares occidentales y que complementa los enfrentamientos violentos convencionales.
En opinión del portavoz de la ONU en Afganistán, Adrian Edwards, "es un entorno informativo muy problemático". La ONU no ha podido confirmar la certeza o falsedad de las informaciones sobre las bajas civiles.
