ROMA, 16 Dic. (EUROPA PRESS/Gloria Moreno) -
Massimo Tartaglia, el hombre que este domingo agredió al primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, permanecerá en la cárcel, según decidió la juez que se está encargando de las investigaciones preliminares, Cristina Di Censo.
La magistrada rechazó así la petición avanzada por los abogados del detenido, que habían solicitado trasladar temporalmente a su cliente, que padece un desequilibrio mental, a un hospital psiquiátrico.
La agresión se produjo el domingo por la tarde, cuando Tartaglia, de 42 años, lanzó una reproducción en miniatura de la Catedral de Milán al primer ministro, dándole en plena cara. Berlusconi fue inmediatamente ingresado en el hospital San Raffaele de Milán, con dos dientes rotos, una fractura en la nariz y heridas en la encía y en el labio.